Dicen que el amor todo lo puede, pero en este caso los enamorados no pudieron seguir adelante con su plan de rendirse afecto para toda la vida. Es que si bien una joven gitana de 16 años se escapó de su hogar para casarse con otro gitano de 24 años la policía no tardó mucho en dar con su paradero y devolverla a su familia.
Según contó en declaraciones a Radio 2 Guillermo Morgan, subjefe de Seguridad Personal, la joven fue hallada en las inmediaciones de Olegario Víctor de Andrade al 2200 en la vivienda de una familia gitana de la ciudad.
"El pedido nos llegó desde el personal de la División de Minoridad, Familia y Violencia Familiar de la provincia de Entre Ríos donde se denunció privación ilegitima de la libertad de la hija menor de edad de una familia gitana de la localidad de Paraná2, expresó Morgan. Y abundó: "Así que comenzamos la búsqueda acá hasta que dimos con el paradero de la chica".
Según fuentes policiales la joven había venido a la ciudad con el objetivo de casarse según los ritos vigentes de la comunidad gitana con un joven rosarino llamado Walter.
Actualmente al interior de los grupos gitanos siguen cumpliéndose la ley gitana del pago de la dote por el casamiento de una chica virgen. En este sentido, del caso de la joven gitana entrerriana trascendió que se pagaron 16 mil pesos en carácter de dote para poder desposarla.
En tanto, como el personal policial de la división de Seguridad Personal estableció a través de los testimonios de la menor y de su suegra que la chica se había trasladado a Rosario sus propios medios, en un remise y junto a su novio Walter determinaron que no había delito de privación ilegítima de la libertad.
Por último, la menor tuvo que dejar a su amor por el que había emprendido la huída de su hogar y fue entregada a su madre que viajó desde la ciudad de Paraná para llevarla a la casa.
Según fuentes policiales, no se encontró ningún dinero que correspondiese a la dote que supuestamente se pagó por la joven, pero las mismas fuentes consultadas remarcaron que este es un caso más de los que muestran los conflictos que suelen vivirse al interior de la comunidad gitana. "Es frecuente que acuerden casamientos y después por cualquier inconveniente tienden a anularlos y así se generan estos malestares", dijeron.