- Rolando Schiavi, zaguero de Newell´s, se habrá sentido como en su casa al pisar el césped del estadio Diego Maradona. Es que los hinchas del Bicho le regalaron una calurosa bienvenida a quien defendió esa camiseta entre 1995 y 2001, año en el que pegó el salto a Boca Juniors pedido expresamente por Carlos Bianchi, etapa en la que el Flaco dio 7 vueltas olímpicas. Si bien no figura en el sitio web oficial de Argentinos como uno de sus ídolos, es cariñosamente recordado por haber formado parte del equipo que ascendió a primera en la temporada 96-97. Y los dirigentes actuales del club de La Paternal se encargaron de que lo sepa: antes del juego de este sábado, al muchacho de Lincoln le entregaron una plaqueta conmemorativa.

- Era previsible que la paciencia de la hinchada rojinegra podría acabarse pronto. Y aun más en las condiciones en las que afrontó Newell´s gran parte del segundo tiempo: perdiendo 3 a 0. Por eso, a nadie sorprendió que las gargantas de los fanáticos del Parque les dedicaran a sus propios futbolistas palabras agraviantes. Es que el equipo lejos estuvo de mostrar al menos una tibia reacción tras la caída frente a Central, y este sábado por la tarde se pareció mucho a un fantasma de sí mismo. 

- Antes del pitazo inicial de Lunatti, todo los concurrentes al estadio (menos los inadaptados de siempre) llevaron a cabo respetuosamente un minuto de silencio. El homenaje fue para Osvaldo Nappe, vieja gloria del Bicho fallecido hace diez días. Nappe fue un gran mediocampista que se destacó en la formación que consiguió el ascenso de Argentinos Juniors a primera en 1955, después de 18 años de militar en segunda división. La línea media que integraban Distéfano, Pederzoli y Nappe en aquellos tiempo fue una de las mas emblemáticas del fútbol argentino.

- Estruendosos e ininterrumpidos fueron los insultos que bajaron esta noche de las tribunas locales destinados al árbitro Pablo Lunatti. Es que el enérgico juez no cuenta con la aceptación del público del Bicho, que no ignoraba el dato estadístico que al fin esta noche se cortó: hacía 7 partidos que Argentinos no ganaba con él como juez. Encima, Newell´s nunca había perdido con arbitraje del bueno de Pablo, cuya madre fue citada todo el tiempo por los groseros labios de la hinchada rojiblanca. El punto supremo de los agravios se dio promediando el primer tiempo: entre los 15 y los 20 minutos, Lunati le mostró la amarilla a 3 jugadores locales (Cabrera, Battión y Ortigoza), y plateas y popular se unieron en un solo coro de injurias. Después, lo que se preveía: el resultado calmó los ánimos y el juez pasó inadvertido.