En la mayor goleada y la mejor producción futbolística en lo que va del Mundial, Argentina fue una fiesta ante Serbia y Montenegro y se impuso por 6 a 0. Con este resultado, el equipo de José Pekerman quedó en octavos de final (tras el triunfo de Holanda sobre Costa de Marfil), mientras que los serbios se despiden de Alemania. En un estadio de Gelsenkirchen casi colmado de argentinos, el equipo albiceleste fue un aluvión de fútbol y obtuvo un categórico triunfo que lo afianza como líder del grupo C. A los seis minutos, Argentina ya estaba arriba con gol de Maxi Rodríguez tras una buena combinación colectiva. El ingreso de Esteban Cambiasso por la lesión de Lucho González no dejó que la selección albiceleste levante el pie del acelerador, y a los 31 hilvanó la mejor jugada de los 19 partidos que se cumplían en la Copa: Esteban Cambiasso, Javier Saviola y Hernán Crespo se juntaron desde tres cuartos de cancha hacia delante y el Cuchu terminó definiendo frente al arquero Jevric. Golazo. Diez minutos después, cuando Serbia y Montenegro tenía la pelota pero no causaba peligro, Saviola robó una pelota cerca del corner, encaró hacia el arco y definió. Jevric alcanzó a desviar, pero por detrás llegó Maxi Rodríguez y tocó a la red antes del cierre de un defensor. Argentina se fue al descanso ganando, gustando y casi goleando, quizás sin imaginar que en el segundo tiempo el resultado se duplicaría. La actitud del equipo de José en el arranque del complemento recordó por momentos a la de esa instancia del partido ante Costa de Marfil, aunque sin llegar a los casi exasperantes toques en el campo propio. La idea era ver cómo reaccionaba el rival, pero los europeos, casi rendidos, no tuvieron ideas para llevar susto alguno al arco de Roberto Abbondanzieri. Esto, sumado a que la defensa argentina se mostró muy sólida en todo momento. Entonces, Pekerman se animó y puso primero a Carlos Tevez y minutos después a Lionel Messi, y todo lo que vino entonces fue para florearse: asistencia de “la Pulga” para que Crespo marque el segundo y siga de racha (78 minutos); jugada personal de Carlitos dejando dos serbios en el piso y definiendo con clase para el quinto (84); y la frutilla del postre de Messi, que tras habilitación de Saviola puso el 6-0 final. Argentina, con dos triunfos en dos encuentro, lidera su zona con seis puntos y si Holanda no pierde ante Costa de Marfil (jugaban en el siguiente turno), se colocará en los octavos de final del campeonato. Sólo una vez Argentina había logrado una victoria por 6-0, cuando en 1978 le ganó aquél polémico partido a Perú por la segunda ronda en cancha de Rosario Central. Antes a eso, le había hecho seis a Estados Unidos por las semifinales de Ururguay en 1930, pero los norteamericanos marcaron uno. Por otra parte, ningún equipo marcaba media docena en un Mundial desde que España goleó a Bulgaria en la primera fase de Francia 98, aunque también fue 6 a 1. Y para encontrar un 6-0, hay que retroceder a México 86, donde la Unión Soviética goleó por ese resultado a Hungría, también en la ronda inicial.
Cargando audio...

El comentario de Alejandro Cachari