En un golpe directo contra el ministro del Interior del grupo Hamas en la Franja de Gaza, aviones de combate de Israel destruyeron hoy su oficina, incrementando las acciones por aire. En tanto era suspendida una ofensiva terrestre, como presión para que sea liberado un soldado israelí. La fuerza aérea de Israel atacó más de 30 blancos en Gaza durante las últimas 24 horas, bombardeando puentes, caminos y plantas de energía, además de disparar cientos de proyectiles de artillería del ejército, para lograr la liberación del soldado Guilad Shalit, de 19 años. Shalit fue capturado el domingo, cuando milicianos de Gaza hicieron un túnel bajo la frontera con Israel, atacando un puesto de avanzada del ejército y matando a dos soldados. Mientras miles de soldados se concentraban en ambos lados de la frontera entre Gaza e Israel, en espera de la orden para iniciar o repeler una invasión masiva del territorio costero, el presidente egipcio Hosni Mubarak dijo que milicianos aceptaron la liberación de Shalit, pero bajo términos que no han sido aceptados por los israelíes. La planeada ofensiva terrestre había sido detenida por solicitud de Egipto, bajo el argumento de que se debía dar a sus mediadores la oportunidad de solucionar la crisis. Sin embargo, otros funcionarios negaron que la suspensión haya sido por recomendación de Egipto, al indicar que solamente respondía al manejo de la crisis, la cual dijeron requería tanto de una muestra de fuerza como de la capacidad de contenerla cuando era necesario.