Una adolescente de Bahía Blanca fue tirada ya muerta en la puerta de un hospital de esa ciudad del sur de la provincia de Buenos Aires.

Mariana Sol Bruna tenía 15 años. Su familia aseguró que había sido amenazada y que “tenía marcas en la cara de rasguños, un moretón en la nariz y los labios cortados”. El hombre sospechado de abandonar su cuerpo fue detenido y liberado unas horas después.

De acuerdo a los resultados de la autopsia, la adolescente no fue violada. La causa de la muerte fue un edema pulmonar agudo y un shock cardiogénico, producidos por una sobredosis.

Las primeras sospechas apuntaron a un joven de 28 años que aparentemente pasó la noche con la adolescente, consumió drogas con ella y que fue identificado por las cámaras de seguridad de un cajero automático que registraron su paso junto a la víctima.

Para el fiscal, Marcelo Romero Jardín, resulta evidente que este joven “se quería deshacer del cuerpo” y planteó una imputación por dejarla en “situación de desamparo”. En cambio, el juez de Garantias, Guillermo Mercuri, lo liberó por considerar que “no hubo abandono de persona”.

La noche que murió, Mariana había insistido para que la dejaran salir con sus amigos. “La dejé y la esperé hasta las 4 y media de la mañana, y no volvió", dijo a TN Gloria, su mamá, y agregó: "Esta persona que la pasó de droga sabía que era menor de edad. La tuvo dando vueltas por toda la ciudad, porque cuando llegó al hospital, mi hija llevaba tres horas de muerta”.