¿De qué viven los políticos una vez que finaliza su mandato en la función pública?, es la pregunta que se hacen muchos ciudadanos obligados a cumplir con su trabajo, mientras ven como algunos logran vivir sin demasiados compromisos de lo acumulado en su vida de político. Este no parece ser el caso de Ángel Baltuzzi, quien luego de 40 años dedicados a la política se presentó como postulante al concurso público de oposición y antecedentes para ocupar el cargo de fiscal de Cámara en los Tribunales de Rosario, el mismo 8 de agosto, día en que el plazo para las inscripciones llegaba a su fin.
“Yo no he sido designado por nadie, ni me lleva nadie en este concurso. La razón de mi presentación se basa en la necesidad de trabajar para seguir viviendo", afirmó Baltuzzi a Rosario3.com, y agregó que "con los magros sueldos que hemos cobrado durante la gestión del gobierno Justicialista en la provincia, no tuvimos demasiadas posibilidades de acumular riqueza como si podrán hacer el gobernador actual y sus ministros que ni bien asumieron, se triplicaron los sueldos”.
Baltuzzi comenzó a los 25 años como concejal del Frejuli y fue diputado nacional por el Justicialismo de Santa Fe hasta 2006 y presidente del Partido Justicialista provincial. Hoy, asegura que vive de su profesión de abogado, atiende lunes y viernes en su estudio jurídico y tres días a la semana viaja a Buenos Aires, donde trabaja como asesor jurídico de la gerencia previsional de Nación AFJP.
“No es que no me guste lo que hago hoy, pero sí me gustaría dejar de viajar obligadamente todas semanas”, aseguró para fundamentar su intención de ocupar un lugar en la Fiscalía, puesto que él define como “clave” en función de la aplicación del nuevo Código Procesal Penal.
“Tengo 62 años y si gano el concurso y accedo al cargo durante los próximos cinco o seis años, estará terminada mi carrera política”, admitió. Baltuzzi busca ocupar la vacante en Fiscalía de Cámara N° 3, que se produjo tras la jubilación de Danilo Imhoff.
Caminos cerrados en el PJ
El dirigente, quien hoy es apenas un vocal del Concejo Ejecutivo del Partido Justicialista, se posicionó una vez más como cercano al ex gobernador Carlos Reutemann, durante cuya gestión se desempeñó como ministro de gobierno, y admite que en la actual perspectiva política a nivel nacional y provincial, “están cerrados los caminos” para que él pueda acceder a un cargo.
Baltuzzi se diferenció de Agustín Rossi, “que acepta sin cuestionar las condiciones de subordinación y obsecuencia que le impone el Kirchnerismo” y de Jorge Obeid ya que el ex gobernador votó a favor de la resolución 125 de retenciones agropecuarias, y él presentó, cuando era diputado, un proyecto que proponía bajarlas.
Del actual gobierno provincial dice que “gastan demasiado a cuenta de una reforma fiscal que ni saben cómo resultará y que están entrando en un cuello de botella del que les costará mucho salir, si siguen endeudándose a este ritmo”.
El desafío en la Cámara
Baltuzzi desanda el camino recorrido por el nuevo Código Procesal Penal y asegura que en 1990 fue él quien impulsó, como senador provincial por el departamento Rosario, el primer proyecto de ley para establecer la oralidad en materia penal, entre otras reformas; y en 1991, como diputado, integró la Comisión Bicameral que siguió trabajando en el proyecto del nuevo Código, que fue resistido por la corporación judicial, porque pretendía la desaparición de las cámaras.
“Ahora, todo aquel trabajo hecho por equipos en los que yo participé, encontró su corolario con la aprobación del Nuevo Código Procesal Penal –dijo Baltuzzi– y el rol que deberá jugar el fiscal de Cámara junto al Procurador, será el de instalar el nuevo Sistema Procesal Penal, lo cual implica un profundo conocimiento de la norma,ya que se trata de una larga y difícil tarea”.
Para ganar el cargo para el cual se postula, el ex ministro reutemannista deberá superar a once contrincantes más, entre los cuales se encuentran jueces y fiscales.


