Se trata de María Luisa Estévez González, una mujer de 31 años que estaba ingresada en el hospital madrileño de La Paz, con un 72 por ciento de su superficie corporal quemada y con pronóstico muy grave.
El último parte médico publicado este sábado por la Consejería de Sanidad de Madrid indica que la víctima falleció a las 19.30 hora local (14.30 de Argentina).
Es la segunda de las 20 personas rescatas con vida que fallece en el hospital. El primero fue un joven de entre 25 y 30 años, que murió el mismo día del accidente aéreo.
En cuanto al resto de los 18 heridos que aún permanecen hospitalizados, 2 se encuentran "muy graves", 1 "grave", 3 "estables dentro de la gravedad", 2 "graves con evolución favorable", 9 con "evolución favorable" y uno con pronostico "leve".
En tanto, los directivos de la compañía aérea Spanair volvieron a reunirse hoy con los familiares de las víctimas del accidente para dar explicaciones sobre el fallo que motivó un retraso en la salida del avión siniestrado el pasado miércoles con 172 personas a bordo y que tenía como destino Las Palmas de Gran Canarias.
La mayoría de las familias de las víctimas acusan a la compañía de negligencia y exigen explicaciones e información sobre la causa del siniestro, que se cobró la vida de 154 personas.
El subdirector de Spanair, Javier Mendoza, explicó que el mecánico que reparó la falla del avión - el mal funcionamiento del calentador de la sonda que mide la temperatura en tierra y vuelo- cumplió con su trabajo.
Según Mendoza, el mecánico decidió desconectar la sonda al considerar que las condiciones climatológicas permitían realizar el vuelo sin este mecanismo, indica el diario El País.
Las familias de las víctimas reprocharon a la compañía desde el primer momento que se haya autorizado a despegar a un avión que había registrado un desperfecto y que tampoco se hubiese dejado a los pasajeros descender del avión.
Según explicó el fiscal del caso, llevará un mes analizar el contenido de las cajas negras del avión, lo que permitirá sacar conclusiones sobre las causas del accidente.
Los investigadores ya cuentan con un video de AENA -empresa pública que gestiona los aeropuertos- que según reprodujo la prensa local, revela que el avión estalló en la pista después de rebotar y avanzar en el pavimento, en vez de explotar en el aire, que era la versión en base a testigos oculares.
En tanto, el calvario de las familias continúa a la par de las labores de identificación de las víctimas, aunque el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, confió este sábado en que la mayoría de los cadáveres estén identificados mañana.
Por el momento, han sido identificados 53 cadáveres, aunque la falta de ADN para contratar dificulta avanzar en esta tarea.
El último parte médico publicado este sábado por la Consejería de Sanidad de Madrid indica que la víctima falleció a las 19.30 hora local (14.30 de Argentina).
Es la segunda de las 20 personas rescatas con vida que fallece en el hospital. El primero fue un joven de entre 25 y 30 años, que murió el mismo día del accidente aéreo.
En cuanto al resto de los 18 heridos que aún permanecen hospitalizados, 2 se encuentran "muy graves", 1 "grave", 3 "estables dentro de la gravedad", 2 "graves con evolución favorable", 9 con "evolución favorable" y uno con pronostico "leve".
En tanto, los directivos de la compañía aérea Spanair volvieron a reunirse hoy con los familiares de las víctimas del accidente para dar explicaciones sobre el fallo que motivó un retraso en la salida del avión siniestrado el pasado miércoles con 172 personas a bordo y que tenía como destino Las Palmas de Gran Canarias.
La mayoría de las familias de las víctimas acusan a la compañía de negligencia y exigen explicaciones e información sobre la causa del siniestro, que se cobró la vida de 154 personas.
El subdirector de Spanair, Javier Mendoza, explicó que el mecánico que reparó la falla del avión - el mal funcionamiento del calentador de la sonda que mide la temperatura en tierra y vuelo- cumplió con su trabajo.
Según Mendoza, el mecánico decidió desconectar la sonda al considerar que las condiciones climatológicas permitían realizar el vuelo sin este mecanismo, indica el diario El País.
Las familias de las víctimas reprocharon a la compañía desde el primer momento que se haya autorizado a despegar a un avión que había registrado un desperfecto y que tampoco se hubiese dejado a los pasajeros descender del avión.
Según explicó el fiscal del caso, llevará un mes analizar el contenido de las cajas negras del avión, lo que permitirá sacar conclusiones sobre las causas del accidente.
Los investigadores ya cuentan con un video de AENA -empresa pública que gestiona los aeropuertos- que según reprodujo la prensa local, revela que el avión estalló en la pista después de rebotar y avanzar en el pavimento, en vez de explotar en el aire, que era la versión en base a testigos oculares.
En tanto, el calvario de las familias continúa a la par de las labores de identificación de las víctimas, aunque el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, confió este sábado en que la mayoría de los cadáveres estén identificados mañana.
Por el momento, han sido identificados 53 cadáveres, aunque la falta de ADN para contratar dificulta avanzar en esta tarea.
