En Central el clima es tenso. Muy tenso. El sábado a la noche, Gimnasia de Jujuy, con un equipo supuestamente con limitaciones e inferior a Central venció al canalla en el mismísimo Gigante de Arroyito por uno a cero y despertó duda generalizada en el estadio.
¿Serán verdaderamente los equipos que visitan al canalla inferiores y con menos jerarquía que el conjunto de Hector Rivoira? La respuesta por lo que se vio hasta el momento es no. Rotundamente no. Este plantel cuenta con varias incorporaciones, pero muy pocos son refuerzos. O al menos no lo han demostrado.
Rivoira cuando llegó al club dijo: “El rival de Central es el propio Central”. Y acotó entre su círculo intimo que con la gente que acompaña al equipo de local van a ganar muchos encuentros. Allegados al entrenador manifestaron que luego del encuentro con los jujeños el propio Rivoira comentó que se había equivocado y que con la reacción del simpatizante de Central en el Gigante no le van a ganar a nadie.
Sobre este momento del equipo y sobre lo ocurrido el sábado a la noche luego de la salida de los jugadores y la rotura de vehículos en el estacionamiento consultamos al manager Gonzalo Belloso, que se manifestó preocupado y que es hora que todos tengan un poco de paciencia para salir adelante.
—¿Cómo viste el tema del sábado? ¿Fue una reacción de la gente espontánea?
—Este es un club politizado, muy politizado, hay personas que no quieren que esté yo en el club, y tratan de trabar el proyecto. En este club es como dijo Barrionuevo: hay que dejar de robar dos años para que salga a flote. La anterior gestión destrozo todo, no dejó nada. Nosotros somos todos transparentes, todo está abierto en este club con nuestra gestión. Querían que traigamos jugadores, los refuerzos llegaron. Nadie me cuestionó cuando trajimos a Shaffer, Guizasola, Peppino, Medina y los demás. Ahora hay que esperarlos un poco mas, pero no tengo ninguna culpa si por allí no rindieron todavía lo esperado. La dirigencia hizo las gestiones del caso.
—¿Qué sentiste el sábado cuando no podían salir de la cancha, ni los jugadores ni ustedes?
—Una gran impotencia y tristeza. La verdad que no esperaba esto. No esperaba una reacción así de la gente, que me parece que mas allá que todos estamos mal y el hincha lo expresa como quiere no era el plateísta común y corriente, me parece que está armado todo. Yo tenía que ir a un velorio, nada más y nada menos que de mi abuela, la mamá de mi padre, y no pude salir; fui al club a apoyar al equipo en un momento difícil para mí y quedé atrapado por 50, 60 o 70 personas. Me llamó mucho la atención, sinceramente. Mi hijo me dice todos los días: «Papá, te van a matar, cuidate por favor». No sé qué decirle al nene.
—¿Te arrepentís de haber asumido este compromiso Gonzalo?
—Mirá cada vez que lo pienso me pregunto porque no hice otra cosa. Yo soy de Central, respiro con los colores de Central, jugué acá, mi vida está en esta institución; a veces me pregunto si hice bien o mal agarrar este compromiso.
—¿Tenés fuerzas para seguir?
—Sí, sí. Tengo gente que confía en mí, que cree en este proyecto y que son honestos, que saben cómo agarramos el club, y que no quieren que sea mas de lo mismo. Vamos a ir para adelante. Pueden tirar piedras, romper autos, insultar durante 20 años, pero yo estoy adentro del club, y voy a hacer todo lo posible con mucho esfuerzo para que el club salga adelante. Desde adentro voy a ejecutar acciones.


