Partiendo de la idea de que 200 años no se cumplen todos los días, el municipio de la ciudad de Rosario está listo para festejar a lo grande el Bicentenario de la Revolución de Mayo. En este sentido, la propuesta de la Municipalidad es convocar a todos los rosarinos a la celebraciín incluso en la preparación previa de la agenda de actividades.

Por eso, la organización va a tener en cierta forma un tinte de creación colectiva ya que todos los habitantes de la ciudad podrán sumar ideas.

A través de una página web especialmente habilitada para la ocasión (www.bicentenariorosario.gov.ar), todos pueden hacer su aporte para tal festejo.

Quienes ingresen a la web pueden incorporar una meta o un proyecto para el Bicentenario y los más jóvenes enmarcados en el programa Ceroveinticinco podrán hacer su intervención a través de lo que se llama Usina de Ideas. Asimismo, se realizará el Tercer Foro Urbano Rosario 2010, del que se hará una publicación.

En tanto, de cara a los festejos el municipio enumeró diez items que pretenden transformarse en acciones concretas –de hecho, algunas ya están en marcha– para que el festejo del Bicentenario no solamente sean actividades sino que queden elementos como testimonio permanente, como lo fue, por ejemplo, el Hospital del Centenario en 1910.

Posteriormente mencionó diez ideas sobre las que se trabajará con el objetivo de 2010. Así se encuentran el anunciado Puerto de la Música, que se levantará en la zona de avenida Pellegrini y la avenida Belgrano; el Hospital del Bicentenario; la iluminación artística del puente Rosario-Victoria y la realización de los Juegos Deportivos del Bicentenario.

Entre los items figuran: la postergada remodelación de la Biblioteca Argentina, el Instituto de la Lengua Española (con la posibilidad de que en Rosario se desarrollen actividades del organismo hispano), cambios en museos, el proyecto Ciudad Digital; el Paseo de los Orígenes y el buque “Santísima Trinidad”.

La embarcación “es una nave que participó de la Guerra de Malvinas que tiene 120 metros de largo y una altura equivalente a cuatro pisos”. La intención es que el barco sea anclado en el puerto de Rosario, de manera permanente, a la altura del monumento que rinde homenaje a los héroes de Malvinas y que se transforme en un museo.