Damián Schwarzstein
(Mar del Plata, enviado especial).- El gobernador electo Hermes Binner salió con los tapones de punta contra el aumento en las retenciones a la exportación de granos y aceites oficializado este miércoles por el gobierno nacional.
En Mar del Plata, adonde llegó para participar del 43° Coloquio de Idea (Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina), a Binner se le borró la sonrisa con la que recibía cada saludo de los empresarios de distintas partes del país que se acercaban a feliicitarlo por su triunfo en Santa Fe, cuando los medios rosarinos presentes en la reunión le preguntaron sobre la medida del gobierno kirchnerista.
“Es una noticia mala que hay que ver como la enfrentamos”, fue la primera reacción, y luego reclamó que el enorme aporte que Santa Fe hace en materia de retenciones –que ahora será mucho mayor– “vuelva en caminos, en producción, en mejoras sociales”.
No sólo eso, marcó que la provincias con eje en la producción agrícola, como Santa Fe, son discriminadas en comparación con las petroleras, como Santa Cruz, la del presidente Néstor Kirchner.
“Creemos que es muy malo, es un impuesto que no es coparticipable mientras las provincias petroleras reciben regalías por la explotación de ese recurso”, apuntó.
El mandatario electo remarcó que parte del dinero que se queda la Nación podría usarse para solucionar el problema de “los santafesinos que toman agua con arsénico, o del 60 por ciento que no tiene cloacas”.
Consultado sobre si va a pedir el cumplimiento del artículo 7 de la vieja ley de coparticipación que establece que la provincia debe recibir el 35 por ciento de las rentas, cuando hoy vuelve cerca del 27, respondió: “No importa por qué vía, pero que la plata vuelva”.
Con Zapatero
Pero no todo era enojo para Binner. El ex intendente estaba contento porque este miércoles pudo confirmar que el sábado tendrá una reunión a solas con el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que visitará Buenos Aires luego de participar en la cumbre iberoamericana en Chile.
“La idea es establecer vínculos de cooperación fundamentalmente para aprender de hechos positivos como del diálogo de capacitación y trabajo”, afirmó.
Además, señaló que se hablará de la posibilidad de acelerar el proyecto para construir un centro de genética vegetal, con aportes españoles, en La Siberia.