San Lorenzo venció a Boca como local este domingo por 1-0 y se ubicó como único escolta de los líderes del torneo, River y Estudiantes, a la vez que relegó al tercer puesto a los xeneizes, que extrañaron a Riquelme y no jugaron bien. Además, sobre el final sufrieron la expulsión de Fabián Vargas por doble amonestación, por lo que el colombiano se pierde el superclásico ante River el domingo próximo.
El Ciclón madrugó a su rival a sólo dos minutos de comenzado el partido, cuando Juan Carlos Menseguez, que anticipó una salida de Mauricio Caranta, quien pretendía despejar el balón, y picó la pelota por encima del cuerpo del arquero, para establecer el 1-0.
Lógicamente, un gol desde los vestuarios modifica los planes y las especulaciones previas de cualquier equipo. Pero Boca no reaccionó. Pareció extrañar demasiado a Riquelme en la conducción y a Palacio, con su desequilibrante velocidad, para concretar alguna jugada que acercara riesgo contra el arco defendido por Orión.
Los xeneizes tuvieron una sola chance en toda la etapa inicial: a los 21 minutos, Gracián quedó sólo dentro del área, por la izquierda, pero se demoró demasiado para definir y su remate alcanzó a ser tapado por un defensor, que desvió la pelota al corner.
En el arranque del complemento, Ischia hizo un cambio llamativo y que quizás dio un indicio de que la prioridad xeneize del primer semestre es la Copa Libertadores: ingresó Palacio (lógica pura, ante un resultado adverso), pero se fue nada menos que Martín Palermo, el histórico goleador xeneize y una garantía de lucha cuando las papas arden” dentro del campo.
Y aunque por momentos el conjunto de la Ribera pareció un claro dominador de las acciones, jamás llegó a inquietar con real peligro el arco azulgrana. Es cierto que Gracián manejó más tiempo la pelota y que Palacio aportó más vértigo ofensivo, pero el protagonismo de Boca pareció más un favor hecho por los dirigidos por Ramón Díaz, que se replegaron demasiado, que una virtud propia y justificada de los visitantes.
Una aproximación con peligro para cada uno arrojó el segundo tiempo. A favor de San Lorenzo, a los 10 minutos Aureliano Torres tomó un rebote y disparó desde fuera del área, la pelota picó antes de llegar al arco y casi se le mete a Caranta junto al palo izquierdo. El arquero, con gran estirada, la sacó nuevamente al corner. A favor de Boca, a los 33 minutos, Roncaglia cabeceó un corner desde la derecha, pero la pelota se estrelló en la base del palo derecho y así se ahogó el grito de gol de los visitantes.
Sobre el descuento, en una jugada confusa, Vargas recibió la segunda amonestación de parte del árbitro rosarino Saúl Laverni y debió dejar la cancha, además de perderse el duelo ante River.
La semana clave de los grandes comenzó con buen semblante para Ramón Díaz y sus dirigidos, que ahora esperan con un importante empujón anímico el duelo de ida ante River, por los octavos de final de la Copa Libertadores. Por el contrario, Boca tendrá la obligación de recuperarse pronto y de manera contundente este miércoles ante Cruzeiro, de Brasil, si quiere llegar con algo más de aire al superclásico del domingo.
Síntesis
San Lorenzo: Agustín Orion; Cristian Tula, Gastón Aguirre, Jonathan Bottinelli, Germán Voboril; Diego Rivero, Juan Manuel Torres, Santiago Hirsig y Aureliano Torres; Gonzalo Bergessio y Juan Carlos Menseguez. Director técnico: Ramón Díaz.
Boca: Mauricio Caranta; Jonatan Maidana, Facundo Roncaglia, Julio Cáceres, Fabián Monzón; Pablo Ledesma, Fabián Vargas, Neri Cardozo; Leandro Gracián; Mauro Boselli y Martín Palermo. Director técnico: Carlos Ischia.
Gol en el primer tiempo: 2m. Menseguez (SL)
Incidencia en el segundo tiempo: 45m. expulsado Vargas (BJ), por doble amonestación.
Estadio: Nuevo Gasómetro
Árbitro: Saúl Laverni
El Ciclón madrugó a su rival a sólo dos minutos de comenzado el partido, cuando Juan Carlos Menseguez, que anticipó una salida de Mauricio Caranta, quien pretendía despejar el balón, y picó la pelota por encima del cuerpo del arquero, para establecer el 1-0.
Lógicamente, un gol desde los vestuarios modifica los planes y las especulaciones previas de cualquier equipo. Pero Boca no reaccionó. Pareció extrañar demasiado a Riquelme en la conducción y a Palacio, con su desequilibrante velocidad, para concretar alguna jugada que acercara riesgo contra el arco defendido por Orión.
Los xeneizes tuvieron una sola chance en toda la etapa inicial: a los 21 minutos, Gracián quedó sólo dentro del área, por la izquierda, pero se demoró demasiado para definir y su remate alcanzó a ser tapado por un defensor, que desvió la pelota al corner.
En el arranque del complemento, Ischia hizo un cambio llamativo y que quizás dio un indicio de que la prioridad xeneize del primer semestre es la Copa Libertadores: ingresó Palacio (lógica pura, ante un resultado adverso), pero se fue nada menos que Martín Palermo, el histórico goleador xeneize y una garantía de lucha cuando las papas arden” dentro del campo.
Y aunque por momentos el conjunto de la Ribera pareció un claro dominador de las acciones, jamás llegó a inquietar con real peligro el arco azulgrana. Es cierto que Gracián manejó más tiempo la pelota y que Palacio aportó más vértigo ofensivo, pero el protagonismo de Boca pareció más un favor hecho por los dirigidos por Ramón Díaz, que se replegaron demasiado, que una virtud propia y justificada de los visitantes.
Una aproximación con peligro para cada uno arrojó el segundo tiempo. A favor de San Lorenzo, a los 10 minutos Aureliano Torres tomó un rebote y disparó desde fuera del área, la pelota picó antes de llegar al arco y casi se le mete a Caranta junto al palo izquierdo. El arquero, con gran estirada, la sacó nuevamente al corner. A favor de Boca, a los 33 minutos, Roncaglia cabeceó un corner desde la derecha, pero la pelota se estrelló en la base del palo derecho y así se ahogó el grito de gol de los visitantes.
Sobre el descuento, en una jugada confusa, Vargas recibió la segunda amonestación de parte del árbitro rosarino Saúl Laverni y debió dejar la cancha, además de perderse el duelo ante River.
La semana clave de los grandes comenzó con buen semblante para Ramón Díaz y sus dirigidos, que ahora esperan con un importante empujón anímico el duelo de ida ante River, por los octavos de final de la Copa Libertadores. Por el contrario, Boca tendrá la obligación de recuperarse pronto y de manera contundente este miércoles ante Cruzeiro, de Brasil, si quiere llegar con algo más de aire al superclásico del domingo.
Síntesis
San Lorenzo: Agustín Orion; Cristian Tula, Gastón Aguirre, Jonathan Bottinelli, Germán Voboril; Diego Rivero, Juan Manuel Torres, Santiago Hirsig y Aureliano Torres; Gonzalo Bergessio y Juan Carlos Menseguez. Director técnico: Ramón Díaz.
Boca: Mauricio Caranta; Jonatan Maidana, Facundo Roncaglia, Julio Cáceres, Fabián Monzón; Pablo Ledesma, Fabián Vargas, Neri Cardozo; Leandro Gracián; Mauro Boselli y Martín Palermo. Director técnico: Carlos Ischia.
Gol en el primer tiempo: 2m. Menseguez (SL)
Incidencia en el segundo tiempo: 45m. expulsado Vargas (BJ), por doble amonestación.
Estadio: Nuevo Gasómetro
Árbitro: Saúl Laverni


