El aumento de 50 centavos en la tarifa de transporte público de pasajeros que decidió realizar por decreto la intendenta Mónica Fein sorprendió a los concejales de la oposición, que aseguraron que se enteraron por los medios de comunicación, y a los usuarios. ¿Qué decían los mismos funcionarios en la previa esta decisión cuestionada?

Antes de la suba sorpresiva –que sumada al aumento de marzo pasado llega al 40 por ciento en el año y se ubicará en 3,20 pesos el viaje–, en los últimos meses pero también pocas horas antes de la firma del decreto, funcionarios de la gestión negaron o relativizaron esa posibilidad. Hasta este martes a la mañana la propia intendente Mónica Fein hablaba apenas de “analizar” el tema, pero a la noche se firmó el aumento.

El 14 de junio el secretario de Servicios Públicos, Pablo Seghezzo, señalaba que el “desfasaje” entre el costo del servicio y la tarifa era del 17 por ciento pero “no se está analizando la idea de hacer un retoque”.

El 3 de octubre, el funcionario del área reconocía “el impacto de la inflación” en la ecuación económica pero negaba un nuevo aumento. Lo propio hizo Seghezzo en una nota que publicó Rosario3.com el 28 septiembre, tras un pedido de la firma Rosario Bus.

Y, este martes, Fein hablaba de un “análisis” del tema y sobre el aumento concreto sólo dijo que “lo veremos”. Sí reconoció que tenía las “atribuciones” para subir la tarifa sin pasar por el Concejo hasta el próximo 10 de diciembre, por lo que pareció que tendría tiempo para tomar la medida. ¿O es que en los próximos dos meses podría haber otro aumento?

El informe: