Continúa la polémica entre socialismo y oposición por la supuesta “fiesta” de nombramientos y gastos superfluos en la administración provincial. El nuevo round de este jueves fue protagonizado por el legislador justicialista Mario Lacava y el ministro de Gobierno y Reforma del Estado Antonio Bonfatti.
Mientras que el primero insistió con la acusación de que la administración de Hermes Binner "se patinó" casi 700 millones de pesos en gastos corrientes e invirtió una cifra "desmesurada" en viáticos, Bonfatti salió a responder con un curioso planteo: “Lo que le molesta a Lacava es que somos muchos funcionarios de Rosario”. Y abundó: “Más que discriminación, nos miran como pensando qué vienen a hacer los rosarinos acá”.
En diálogo con Luis Novaresio (Radio 2), Lacava insistió en que "sí hay fiesta en la provincia" y dio números para justificar su postura. "Cuando Binner asume la gobernación se entrega una provincia ordenanda com más de 1600 milones de pesos en plazos fijos y cuentas corientes, ahi dentro había 470 millones de pesos de libre disponibilidad. Durante 2008 se recaudó un 38 por ciento más en relacion a 2007, eso en plata son 1600 millones de pesos más. Pero el gasto corriente en relación al 2007 creció un 44 por ciento, 2200 millones más", fue la matemática planteada por Lacava, quien resumió: "Si hace resta, hubo 600 millones de pesos gastados que no se recaudaron, ahí el origen del rojo de caja".
El legislador sostuvo que el socialismo "reconoce que en los primeros cuatro meses de 2009 hay casi 400 millones de pesos de déficit". Y planteó: "¿Qué pasó en un año y cuatro meses para que se patinen casi 700 millones de pesos en gastos corrientes? Esto no tiene que ver con obra pública, gastos en rutas, hospitales y escuelas". Detalló que "el gasto corriente es el gasto de funcionamiento, el gasto político" y que esto se explica con "la triplicación de funcionarios políticos, viáticos, viajes, gastos de representación, subsidios, festivales caros". Aclaró, además, que "no se trata solo del sueldo, que se triplicó, sino que los viáticos aumentaron de manera descomunal, un 16 mil por ciento: hoteles, comidas, viajes".
A la hora de responder a las acusaciones, Bonfatti planteó también en diálogo con Radio 2 que, en todo caso, si el socialismo está de fiesta “es porque bajó la mortalidad infantil y se construyeron escuelas”. Y sobre las acusaciones detalló: “Ningún funcionario cobra viáticos desde enero”. Consultado sobre el supuesto “festival” de nombramientos, aseguró que a la hora de hablar de funcionarios técnicos y políticos “había 350 cuando llegamos y ahora hay 510, pero tenemos más arquitectos y médicos”. Además, recordó que “hay concursos desde enero, no se entra a la administración pública sin concursos”.
Fiesta, qué fantástica esta fiesta
Las acusaciones sobre la supuesta “fiesta socialista” no son nuevas. Ayer el gobernador Binner rechazó esos planteos y defendió su gestión de las críticas de la oposición sobre supuestos nombramientos innecesarios y gastos superfluos.
"No sé si esto es una fiesta, pero nosotros estamos muy contentos por lo que estamos avanzando en Santa Fe", fue el planteo de ayer del gobernador. "Quienes ahora hablan de fiesta quisieron cerrar la Empresa Provincial de la Energía o transferirla al sector privado", fue la frase con la cual apuntó contra su antecesor Carlos Reutemann. "Y si los que hoy hablan de fiesta hubiesen privatizado la EPE, hoy estaríamos en una situación peor que la de Aguas", concluyó.


