El gobernador Antonio Bonfatti y la intendenta Mónica Fein inspeccionaron las tareas que se están realizando en la primera etapa de construcción del aliviador 3.
La demorada obra, demandada por intendentes y presidentes comunales de la región para aliviar la desembocadura del arroyo Luedueña, tiene un plazo de ejecución de 40 meses.
“Es una obra importantísima, que va a dar respuestas definitivas al drenaje de las aguas en una zona muy amplia de la ciudad, que ya comenzó a hacerse, y tendrá una extensión de 2.300 metros”, describió el gobernador.
“Vamos a tratar de acortar los plazos en función de mayores inversiones, y ojalá podamos conseguir créditos externos para no seguir postergando los derechos de la gente”, afirmó Bonfatti.
En tanto, Fein agradeció al gobernador por “hacer esta importante inversión en la ciudad, que es fundamental, porque le va a dar tranquilidad a muchísimos barrios de la ciudad. Es una inversión millonaria, que habla del compromiso que tiene el gobierno provincial con Rosario”.
El objetivo de la obra es elevar los niveles de protección contra inundaciones de diferentes sectores poblados comprendidos en la cuenca del arroyo Ludueña ante crecidas asociadas a eventos extraordinarios, explicaron los técnicos del Ministerio de Aguas y Servicios Públicos.
En esta etapa de obra se ejecutará una embocadura en el arroyo Ludueña, aguas abajo del puente de Avenida Sorrento.
Así mismo se construirá un conducto principal, cuya traza se desarrolla en su totalidad por avenida Sorrento hacia el este, con una longitud de aproximadamente 2.300 metros.