La pastera finlandesa Botnia hizo gestiones ante la Iglesia para limpiar la imagen de la papelera que está construyendo a orillas de río Uruguay. Quiere convencer a los vecinos de Gualeguaychú de que la planta no contamina el medio ambiente.

Botnia invitó al obispo y a un cura de Gualeguaychú a pasar una semana en Finlandia; los religiosos rechazaron el ofrecimiento.

A mediados del año pasado, la firma europea invitó al obispo de Gualeguaychú, monseñor Jorge Lozano, a viajar a Finlandia para conocer la modalidad de trabajo de esa empresa y, ante la negativa del prelado, en noviembre repitió la oferta a un sacerdote entrerriano que también decidió rechazarla.

"En ese momento me comentó el tipo de tareas que estaban desarrollando y manifestó que no son contaminantes como se decía", contó Lozano en una entrevista realizada durante su paso por Buenos Aires.

En la segunda visita, a fines de julio o principios de agosto, ese mismo alto funcionario de Botnia reiteró que los procesos implementados por ella para la elaboración de pasta celulosa no contaminan y ofreció a Lozano, o a una persona que fuera designada por el obispo, viajar a Finlandia.

"Le dije que no correspondía que alguno de nosotros viajara y que tomaran contacto con alguien de la asamblea de Gualeguaychú o gente con capacidad técnica de discernimiento como el equipo de estudios ambientales de la Universidad Católica Argentina o de alguna de las fundaciones que siguen los temas ambientales", dijo el obispo, y agregó: "Pero no me consta que hayan tomado contacto con estas personas u organizaciones que yo les sugerí".

A los tres meses, los empresarios europeos volvieron a la carga. Según contó Lozano, un sacerdote de su diócesis fue contactado por personal de Botnia para hacerle la misma oferta que al obispo: viajar a Finlandia para conocer la empresa in situ.

A mediados del año pasado, la empresa invitó a periodistas, científicos y dirigentes de Gualeguaychú a conocer sus instalaciones en Finlandia.

No sólo Botnia intentó valerse de la intervención de la Iglesia. También el gobernador de Entre Ríos, Jorge Busti, pidió a Lozano, en abril pasado, cuando todavía se mantenía la ruta 11 cortada por los vecinos, que los persuadiera de poner fin a esa medida.

"Busti fue a Gualeguaychú a entregar una carta a los vecinos en la que les solicitaba que levantaran los cortes y pasó primero por el obispado para darme una copia y conversar. Me preguntó si desde el obispado podíamos ayudar para el levantamiento de los cortes", contó Lozano.