El vicepresidente Amado Boudou viajó a Haití para despedir el año con los argentinos que integran la misión de paz en ese país.
El vicepresidente partió este lunes hacia Puerto Príncipe. "Viajamos con la misión de llevar el saludo de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a los cascos blancos y azules que desarrollan una tarea tan importante en el mantenimiento de la paz y en cuestiones humanitarias en un país hermano tan golpeado", dijo antes de salir.
El vicepresidente destacó asimismo la "posibilidad de poder pasar el 31 diciembre con nuestras tropas, unos 700 hombres y mujeres que desarrolan esta tarea tan importante en un país que sufrió mucho".
La participación de los miembros de las fuerzas nacionales en la misión de la ONU fue prorrogada por dos años más por el Congreso de la Nación a principios de este mes, en el marco de las sesiones parlamentarias extraordinarias.
La resolución aprobada por las dos cámaras del Congreso destaca que Argentina "ha contribuido activamente al restablecimiento de la estabilidad política y humanitaria, a partir de su participación en la misión de Naciones Unidas en Haití".
La misión se inició en 2004 por una resolución adoptada por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y fue reafirmada en 2010 luego del devastador terremoto que dejó, según las autoridades locales, más de 200 mil muertos.
El Consejo de Seguridad, en su resolución 1908 de 19 de enero de 2010, refrendó la recomendación del Secretario General de aumentar la dotación general de la Minustah con el fin de apoyar la rápida reconstrucción de ese país.
En ese contexto, la mayor parte de la participación Argentina se desarrolla en la Bahía de Gonaives, de las zonas más conflictivas de Haití.
La fuerza militar internacional apostada en ese país incluye militares provenientes de Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Croacia, Ecuador, Estados Unidos, Filipinas, Francia, Guatemala, Italia, Jordania, Nepal, Pakistán, Paraguay, Perú, Sri Lanka y Uruguay.
La colaboración Argentina con Haití no se circunscribe solo al plano de la seguridad sino que también se da en e marco de la cooperación no tradicional, conocida como cooperación Sur-Sur.
En ese contexto, Argentina desarrolla en Haití el programa Prohuerta que ayudó a crear 12.500 huertas, que abarca a más de 90 mil personas y que tiene por objetivo extenderse.
El proyecto es coordinado por el área de Cooperación Internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Fuente: Télam