El año 2006 será un año que los Escobar no recordarán con buen ánimo. Es que la familia de Brian, el chico de 14 años que días atrás se transformó en un improvisado bombero para salvar a los suyos de un incendio que invadió su casa, vivió otro mal trago. Este lunes, su verdulería ubicada en Boedo al 2000, en la zona noreste de la ciudad, sufrió un robo que dejó además parte del local destruido. Los ladrones forzaron la puerta del comercio en la noche del lunes y tras ingresar se llevaron una balanza electrónica y mercadería. Pero el hecho fue más allá del robo mismo, ya que los que delincuentes rompieron todo lo que no pudieron apropiarse. "En este año me pasó de todo, primero falleció mi hermanito, después lo del incendio y ahora esto", enumeró Brian, con un visible gesto de tristeza ante las cámaras de Canal 3. "Si hay un Dios, que se acuerde de nosotros", agregó casi implorando. El adolescente había cobrado popularidad tras convertirse en un héroe el pasado 23 de mayo, cuando un incendio se apoderó de su hogar y él rescató del fuego a sus padres y sus dos hermanos. Por ese valiente acto, Brian fue declarado días después "bombero honorario" por los Bomberos Voluntarios.