No es una buena racha para Britney. Luego de que los medios la destrozaran por su deslucida presentación en Las Vegas, la princesa del pop recibió más malas noticias en el marco de la batalla legal con su ex por la custodia de sus dos hijos: un funcionario judicial ordenó que la cantante se haga tests al azar y contrate a un especialista que la ayude a criar a los chicos. Los documentos fueron publicados en el sitio de internet TMZ.com. 

Hacía días que el panorama se mostraba complicado. De hecho, su ex marido Kevin Federline –padre de Sean Preston, de 2 años, y Jayden James, de 1– había asegurado que iba a llevar ante el juez a un testigo que declararía que la artista consumía drogas frente a su shijos.

"Basado en la evidencia presentada, la corte encuentra que hay un uso habitual, frecuente y continuo de sustancias controladas y alcohol por parte de la solicitante", señaló en su decisión el comisionado de la corte superior Scott Gordon, refiriéndose a Spears.

Gordon ordenó que tanto Spears, de 25 años, como Federline, de 29, completen un programa de "paternidad sin conflictos" y dijo que ambos deben evitar realizar comentarios despectivos sobre el otro. Es decir, tendrán responsabilidades compartidas.

Pero además Gordon ordenó que la cantante se someta a pruebas contra drogas y alcohol dos veces por semana en fechas y horas al azar. Además, la cantante debe reunirse con un consejero al menos una vez por semana para tratar temas de la maternidad y trabajar con un especialista al menos ocho horas en al menos dos sesiones a la semana.