El Parque de la Ciudad de Buenos Aires reabrió sus puertas tras la clausura de 2003, pero esta vez no busca sólo ser una feria de diversiones sino un espacio educativo y de entretenimientos. Y bajo esa consigna es que las autoridades del complejo pretenden importar una idea rosarina: la Isla de los inventos, el complejo que aquí funciona en Corrientes y Wheelwright y que combina como pocos recreación y educación para chicos y grandes.

“Estamos centrando las ideas en lo cultural, lo recreativo, lo artístico. Y pretendemos, además de brindar juegos infantiles, agregar algo seguro y que no implique riesgos, para mejorar la oferta para los visitantes”, dijo en Radio 2 Nacha Bronstein, encargada de prensa del Parque.

Y esa idea responde a que en 2003, la Justicia clausuró 12 juegos del predio y el Gobierno porteño lo cerró. Por eso, las primeras medidas estuvieron centradas en mejorar las condiciones de seguridad.

Y entre novedades como espectáculos teatrales para chicos, talleres de higiene urbana y espacios verdes para tomar mate, el Parque quiere una Isla de los inventos a semejanza de la de Rosario.

“Estamos interesados y en tratativas con la gente de Rosario. Es muy probable que la Isla llegue a formar parte de este proyecto”, indicó Bronstein en diálogo con Pili Ponce.

Después de casi cuatro años de abandono, el Parque de la Ciudad fue reinaugurado este sábado en avenida Cruz y Escalada de la Capital Federal, aunque de las 120 hectáreas originales actualmente funcionan 30.