El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se refirió con un insulto a la

situación en Medio Oriente, mientras conversaba con el primer ministro británico, Tony Blair, en un descanso durante la cumbre del G8 en San Petersburgo, sin notar que había un micrófono.

 

"La ironía es que lo que realmente se debe hacer es convencer a Siria para que Hezbollah pare con esta mierda", dijo Bush mientras comía un trozo de pan con manteca durante un descanso en el marco de la Cumbre de los Ocho países más industrializados del mundo (G8), que se celebró en San Petersburgo, Rusia.

 

El primer ministro británico, quien se encontraba parado junto Bush, intentaba convencer al mandatario estadounidense de alinear una fuerza internacional entre Israel y el sur del Líbano.

 

Los mandatarios conversaban sobre un posible viaje de la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, a la región. "Creo que Condi (en referencia a Rice) va a ir allí muy pronto", dijo Bush.

 

A esto, Blair respondió: "Bien, eso es lo importante. Va a llevar tiempo sacar esto adelante. Debe tener éxito si viaja a la región", tras lo cual llegó el exabrupto de Bush.

 

Luego, el mandatario estadounidense hizo un comentario sobre la hora en que debía partir de Rusia e instantes después se dio cuenta que el micrófono estaba encendido y lo apagó.

 

Fuente: Télam