Las negociaciones entre los camioneros y los empresarios transportistas volvieron a fracasar y el titular del sindicato de conductores de vehículos de carga, Pablo Moyano, advirtió que volverán los paros sorpresivos, como el que el viernes afectó a los camiones de caudales y dejó sin efectivo a muchos cajeros automáticos.

El viernes los sindicalistas advirtieron que el próximo rubro en el que podría haber medida de fuerza es el transporte de combustible.

El secretario adjunto del gremio de camioneros ratificó hoy el reclamo de un aumento del 30 por ciento para los choferes de cargas y aseguró que la única manera de acercar su postura a la cifra que ofrecieron los empresarios ocurriría si el gobierno disminuye el impuesto a las ganancias o si se extiende el beneficio de la asignación por hijo.

La patronal ofreció un 21 por ciento, lo que para el hijo de Hugo Moyano, secretario general de la CGT, es “una burla”.