En su quinta declaración ante el juez Javier Ríos, Jorge Mangeri, acusado de violar y matar a Ángeles Rawson reiteró en su inocencia. Sin embargo, Ríos insistió en la contundencia de la evidencia en su contra. El portero podría enfrentarse ahora a prisión perpetua.
“No soy un violador. Nunca violaría a una menor”, aseguró entre llantos Mangeri tras casi cinco horas de declaración indagatoria este miércoles según informó Télam. Además, explicó que su relación con Ángeles “era de muy pocas palabras, ella era muy introvertida”. Esto indicó Miguel Ángel Pierri a la vez que dijo que estaría descartado el femicidio.
El portero, único sospechoso del asesinato, fue indagado luego de que la Cámara del Crimen volviera a rechazar un planteo de nulidad de la defensa respecto a la contaminación de los estudios de ADN que lo incriminaron. No obstante, para Ríos la evidencia sería contundente: durante la hermética audiencia le leyó al imputado los resultados del análisis de rastros de piel encontrados bajo tres de las uñas de la mano derecha de la joven. La información genética correspondía a Mangeri.
Con lo cual Ríos no descarta recrudecer la imputación por "criminis causa" –cuando se mata para ocultar otro delito, en este caso el ataque sexual, y lograr la impunidad–, lo que se castiga con prisión perpetua.
Consultado sobre las 53 lesiones notorias que tenía al momento de ser arrestado, ocho de las cuales eran compatibles con arañazos, Mangeri sostuvo que se había caído por una escalera mientras estaba pintando.