Alguna vez la sorpresa la despertaron los japoneses, quienes estando en cualquier parte del mundo, portaban sus cámaras listas para registrar el momento. Sin embargo, en los últimos años, la usanza se extendió a América Latina y en nuestro país ya no despierta la más mínima atención. Es muy común ver tanto a grandes como a chicos disparar sin parar, captando cada instante como único.

Esta tendencia tiene contenta a la Cámara Argentina de Comerciantes e Importadores de Óptica, Fotografía y Afines (Cacieife). Una fotografía de este año muestra un incremento de las ventas de cámaras digitales en el país en más de un 50 por ciento con respecto al 2006, impulsadas por la baja de precios, las facilidades de pago y la llegada de nuevas tecnologías.

De acuerdo a los especialistas, en el país las ventas de cámaras digitales vienen creciendo exponencialmente, en el año 2004 se facturaron 23 millones de dólares, en el 2005 unos 32 millones y en 2006 se llegó a los 60 millones de dólares. Se prevé que para 2007 se llegue a una facturación total de 76,5 millones de dólares.

La cámara espera que para este año el crecimiento llegue al 35 por ciento, impulsado esencialmente por el pago en cuotas y el crédito. Se importará 750 mil equipos, contra los 550 mil del 2006.Las ofertas, las cuotas y la avidez de los usuarios por tener una cámara entre sus manos, hicieron del 2006 el año de las cámaras fotográficas digitales y la tendencia, según coinciden las proyecciones, continuará en 2007.

El fenómeno será apoyado, fundamentalmente, por la llegada de nuevos modelos y por un descenso de entre un 10 y un 15 por ciento en los precios. Hoy, más de un millón y medio de cámaras digitales pertenecen a ciudadanos argentinos.