El peligro en cada esquina. La difícil situación por la que atraviesan algunas familias de la ciudad es la razón por la cual todos los miembros intentan llevar una moneda a la casa. Muchos menores de edad se exponen en las esquinas con semáforos con el objetivo de conseguir una limosna.
La pobreza muchas veces es más que el no tener para comer o vestir. Es estar indefenso ante los ojos de una sociedad que aún no logra abarcar con políticas acordes en tiempo y forma, a todas esas personas vulnerables dentro del sistema. Los niños, como siempre siguen siendo los más expuestos.
Sin ir más lejos, a principio de semana, un pequeño de seis años fue atropellado por un vehículo en las intersecciones de Avenida Rondeau y Avellaneda. La crónica policial de ese día habló de una colisión involuntaria entre vehículos, que terminó impactando en el joven limpiavidrios que estaba trabajando justo en esa esquina. La conmoción emocional de sus hermanitos también pequeños, no sirvió para que se tome conciencia del peligro que significa moverse entre vehículos en busca de una limosna. El día después la intersección volvió a ser el escenario de trabajo de un menor, que tal como grafica el video: danza rap por unas monedas.
Por su parte, desde la municipalidad la secretaría de Promoción social lleva adelante acciones que intentan contener una situación de pobreza cada vez más creciente. En ese marco, e. Programa integral de atención e intervención trabaja a partir de la demanda que realizan instituciones estatales, organizaciones de la sociedad civil, familiares o vecinos.
La situación de calle en números
De acuerdo estadísticas que presenta el sitio de la Municipalidad de Rosario, durante el 2007 en el marco del Programa de Promoción Familiar se registraron 432 chicos que pasan parte de su tiempo en la calle, de los cuales un 64% son niños y un 36% son niñas. En total, los 183 grupos familiares atravesados por esta problemática representan casi la mitad (42%) de las familias abordadas por el Área de la Niñez.
Sin embargo, la crisis desatada el pasado año sumada a la ya desacelerada economía nacional, parece haber multiplicado los casos de pobreza.
Para el programa municipal un niño es considerado en situación de calle cuando: “Transcurre parte del día en la vía pública realizando alguna tarea que le permite obtener un ingreso en dinero, ya sea sólo, organizado entre pares o con miembros de su familia, o hace un uso del espacio de calle como parte casi exclusiva de su socialización: único ámbito de encuentro y relación entre pares, de pasaje de tiempo libre, de deambular o pernocta en la vía pública ya sea casualmente o con cierta permanencia permanentemente”.
Multicausalidad
El mismo informe destaca que entre las variables que impulsan a las familias a estar en situación de calle, de los 183 Grupos familiares, 130, es decir un 71% se encuentran atravesados por la situación económica como variable que los impulsa a la situación de calle, mientras que 79 están afectados por Conflictos familiares (43%) y 59 por Desafiliación comunitaria (32%).
La pobreza muchas veces es más que el no tener para comer o vestir. Es estar indefenso ante los ojos de una sociedad que aún no logra abarcar con políticas acordes en tiempo y forma, a todas esas personas vulnerables dentro del sistema. Los niños, como siempre siguen siendo los más expuestos.
Sin ir más lejos, a principio de semana, un pequeño de seis años fue atropellado por un vehículo en las intersecciones de Avenida Rondeau y Avellaneda. La crónica policial de ese día habló de una colisión involuntaria entre vehículos, que terminó impactando en el joven limpiavidrios que estaba trabajando justo en esa esquina. La conmoción emocional de sus hermanitos también pequeños, no sirvió para que se tome conciencia del peligro que significa moverse entre vehículos en busca de una limosna. El día después la intersección volvió a ser el escenario de trabajo de un menor, que tal como grafica el video: danza rap por unas monedas.
Por su parte, desde la municipalidad la secretaría de Promoción social lleva adelante acciones que intentan contener una situación de pobreza cada vez más creciente. En ese marco, e. Programa integral de atención e intervención trabaja a partir de la demanda que realizan instituciones estatales, organizaciones de la sociedad civil, familiares o vecinos.
La situación de calle en números
De acuerdo estadísticas que presenta el sitio de la Municipalidad de Rosario, durante el 2007 en el marco del Programa de Promoción Familiar se registraron 432 chicos que pasan parte de su tiempo en la calle, de los cuales un 64% son niños y un 36% son niñas. En total, los 183 grupos familiares atravesados por esta problemática representan casi la mitad (42%) de las familias abordadas por el Área de la Niñez.
Sin embargo, la crisis desatada el pasado año sumada a la ya desacelerada economía nacional, parece haber multiplicado los casos de pobreza.
Para el programa municipal un niño es considerado en situación de calle cuando: “Transcurre parte del día en la vía pública realizando alguna tarea que le permite obtener un ingreso en dinero, ya sea sólo, organizado entre pares o con miembros de su familia, o hace un uso del espacio de calle como parte casi exclusiva de su socialización: único ámbito de encuentro y relación entre pares, de pasaje de tiempo libre, de deambular o pernocta en la vía pública ya sea casualmente o con cierta permanencia permanentemente”.
Multicausalidad
El mismo informe destaca que entre las variables que impulsan a las familias a estar en situación de calle, de los 183 Grupos familiares, 130, es decir un 71% se encuentran atravesados por la situación económica como variable que los impulsa a la situación de calle, mientras que 79 están afectados por Conflictos familiares (43%) y 59 por Desafiliación comunitaria (32%).
