Un juez español autorizó la entrada de un menor de siete años con pasaporte argentino que estuvo retenido durante dos días en el aeropuerto de Madrid, donde llegó a sufrir una crisis de ansiedad.

El abogado Marcelo Belgrano, encargado de representar a la familia del niño, confirmó que el pequeño abandonó el aeropuerto el miércoles por la tarde, después de que un tribunal estimase el recurso judicial presentado contra su expulsión.

El pequeño aterrizó en Madrid el pasado lunes acompañado de su padre, un inmigrante con nacionalidad boliviana que reside legalmente con su esposa en España, para pasar dos meses con su familia. El niño no vive habitualmente en el país europeo.

Aunque el menor tenía billete de ida y vuelta e iba con su padre, la policía denegó la entrada a ambos en el control de inmigración y ordenó la deportación del pequeño, asegurando que se trataba de una reagrupación familiar encubierta.

Según Belgrano, el pequeño sufrió una crisis de ansiedad tras permanecer dos días encerrado en la sala de tránsito del aeropuerto madrileño de Barajas, mientras aguardaba la resolución del juez.

No es el primer caso en el que un menor protagoniza un incidente en el aeropuerto de Barajas. El pasado junio, un juez detuvo la expulsión de un dominicano de sólo tres años que viajaba a España a reunirse con sus padres, quienes se encontraban en situación irregular.

Algunas asociaciones de inmigrantes han criticado la dureza de los controles de extranjería en el aeropuerto de Madrid. Incluso el Defensor del Pueblo llegó a denunciar en el parlamento que la policía de Barajas había impedido la entrada de niños con ciudadanía española, pero de padres extranjeros.