No todo lo que brilla es oro y el boom de la construcción tiene su contracara. Es que se siguen sumando reclamos de vecinos rosarinos sobre obras en construcción lindantes con sus viviendas.

Ahora se trata de un bar ubicado en avenida Pellegrini al 1800 (entre Dorrego e Italia) donde no sólo desde hace tiempo caen ladrillos y materiales del hormigón en el patio, sino que ahora un taladro atravesó la pared.

La herramienta no sólo agujereó de lado a lado también ingresó al local mientras dos parroquianos tomaban una café en la mes. apoyada en la pared.

"Estabamos acostumbrados a la piedras que cada tanto caian para nuestro lado desde que empezó la obra, pero lo de ahora fue tremendo", contó Rocío, la encargada del local. Y añadió: "Estábamos con clientes y se pasaron de la pared con la agujereadora, el material cayo arriba de las mesas y nadie se hace cargo de ese error".

Aunque el dueño del local reiteró las denuncias, nadie hasta el momento se hizo eco del reclamo que es uno de los tantos que se presenta como la contracara del boom.