Las audiencias del juicio a represores que se desarrolla en los Tribunales Federales de Rosario se retomaron poco después de las 14 de este lunes tras los debates de la mañana que dieron inicio a la histórica jornada. En tanto, la controversia por la falta de espacio en la sala donde se juzga a los 5 represores continuó este lunes.
El Tribunal Federal Nº 1 juzga a Juan Daniel Amelong, Pascual Guerrieri, Jorge Fariña, Eduardo Constanzo y Walter Pagano por los delitos de homicidio, secuestro y torturas.
Organismos de derechos humanos, militantes y público en general permanecían sobre bulevar Oroño donde la instalación de pantallas no garantizaban la buena recepción del audio y la imagen. En tanto, funcionarios de la provincia sostuvieron que en reuniones previas al inicio del proceso, la admistración binnerista ofreció a funcionarios judiciales varios lugares “pero siempre pusieron reparos”.
Falta espacio
Juan Ruani, testigo en el marco del juicio y responsable zona sur del Programa de Protección de Testigos del gobierno de Santa Fe, aseguró al móvil de Radio 2 que participó de varias reuniones de la comisión de apoyo en el marco de la secretaría de Derechos Humanos santafesina. “Fuimos dando varias posibilidades para trasladar las audiencias pero desde la Justicia siempre pusieron reparos”, manifestó.
“Argumentaban la imposibilidad de trasladar instrumentos o cuestiones de logística”, continuó el funcionario.
Este lunes era imposible poder observar las audiencias desde las pantallas colocadas afuera de la sala y el audio no se había escuchado hasta media mañana. Grupos de jovenes y adolescentes se instalaron sobre Oroño para seguir las novedades del juicio frente a los Tribunales. Sobre el bulevar realizaban pinturas sobre telas en apoyo a familiares, querellantes y testigos.
El juicio se puede seguir desde el sitio web de la provincia que ofreció el recurso ante lo reducido de la sala –entre 20 y 40 personas– y por el interés público de las jornadas.
El Tribunal Federal Nº 1 juzga a Juan Daniel Amelong, Pascual Guerrieri, Jorge Fariña, Eduardo Constanzo y Walter Pagano por los delitos de homicidio, secuestro y torturas.
Organismos de derechos humanos, militantes y público en general permanecían sobre bulevar Oroño donde la instalación de pantallas no garantizaban la buena recepción del audio y la imagen. En tanto, funcionarios de la provincia sostuvieron que en reuniones previas al inicio del proceso, la admistración binnerista ofreció a funcionarios judiciales varios lugares “pero siempre pusieron reparos”.
Falta espacio
Juan Ruani, testigo en el marco del juicio y responsable zona sur del Programa de Protección de Testigos del gobierno de Santa Fe, aseguró al móvil de Radio 2 que participó de varias reuniones de la comisión de apoyo en el marco de la secretaría de Derechos Humanos santafesina. “Fuimos dando varias posibilidades para trasladar las audiencias pero desde la Justicia siempre pusieron reparos”, manifestó.
“Argumentaban la imposibilidad de trasladar instrumentos o cuestiones de logística”, continuó el funcionario.
Este lunes era imposible poder observar las audiencias desde las pantallas colocadas afuera de la sala y el audio no se había escuchado hasta media mañana. Grupos de jovenes y adolescentes se instalaron sobre Oroño para seguir las novedades del juicio frente a los Tribunales. Sobre el bulevar realizaban pinturas sobre telas en apoyo a familiares, querellantes y testigos.
El juicio se puede seguir desde el sitio web de la provincia que ofreció el recurso ante lo reducido de la sala –entre 20 y 40 personas– y por el interés público de las jornadas.
