Una investigación de la Fundación Apertura sobre la coparticipación a municipios y comunas, un tema central en el debate político santafesino, arroja una conclusión sencilla: “Los gobiernos centrales, tanto nacional como provincial, prefieren distribuir los recursos por fuera de la ley de coparticipación, de manera discrecional, para asegurar su poder político”.
¿Por qué? Muy simple: entre 2002 y 2005 la recaudación provincial, tanto por ingresos propios como los que llegan a través de transferencias nacionales, aumentó un 157,1 por ciento. Sin embargo, los giros a los municipios y comunas de la provincia sólo crecieron, en el mismo período, el 94,55 por ciento.
No es poco si se tiene en cuenta que, según el informe de la Fundación Apertura, “alrededor del 50 por ciento de los recursos de los municipios y comunas de Santa Fe provienen de la coparticipación provincial”.
De hecho, en el marco del conflicto entre la Municipalidad de Rosario y sus empleados, que ya realizaron un paro en reclamo el 20 por ciento de aumento salarial, el secretario de Hacienda local, Carlos Fernández, sostuvo en repetidas ocasiones que será imposible hacer frente a la demanda sindical si no aumentan las partidas de la coparticipación. Algo similar pasa en Santa Fe, donde la Secretaría de Hacienda dice que con los ingresos actuales sólo alcanza para pagar sueldos.
Para la Fundación Apertura, “las continuas alteraciones del sistema de coparticipación federal, las modificaciones en el sistema de coparticipación provincial, y los avatares económicos de nuestro país, han sometido a los municipios a un proceso de erosión de ingresos muy fuerte que de mantenerse provocará a corto plazo su desfinanciación”.
Y enumera las razones:
1) “El congelamiento de los avalúos de los impuestos inmobiliarios y patentes que son los impuestos que más se coparticipan a los municipios y comunas, pero que inciden escasamente en las finanzas provinciales, por lo que las administraciones no los modifican desde 1991”.
2) “Las excepcionalidades del sistema de coparticipación federal que le quitaron fondos a las provincias, y éstas en forma ampliada se los quitaron a los municipios.
Por ejemplo, las sumas fijas que el Estado nacional le transfiere a las provincias no son coparticipados a los municipios, lo mismo que las sumas fijas para atender la Caja de Jubilaciones provincial, y otras partidas”.
3) “Las excepcionalidades que introdujo la provincia de Santa Fe en sucesivas administraciones sobre el sistema de coparticipación provincial atenuó el incremento de la recaudación que debería haber transferido. Es así que el incremento de los montos transferidos a municipios desde 2002 a valores históricos han aumentado un 95%, menos que lo que aumentaron los sueldos, servicios e insumos que deben afrontar. Y es mucho menor al crecimiento de los fondos provinciales que se incrementaron 152%. A eso le agregamos los topes decididos por la administración provincial en los montos a coparticipar de ingresos brutos”.
Según el informe “todos estos elementos completan un presente y un futuro de enorme debilidad fiscal para los municipios y comunas, que dependen de partidas extraordinarias sujetas a la voluntad del la administración provincial”. Y se sabe, todos los municipios y comunas son iguales, pero algunos son más iguales que otros.
¿Por qué? Muy simple: entre 2002 y 2005 la recaudación provincial, tanto por ingresos propios como los que llegan a través de transferencias nacionales, aumentó un 157,1 por ciento. Sin embargo, los giros a los municipios y comunas de la provincia sólo crecieron, en el mismo período, el 94,55 por ciento.
No es poco si se tiene en cuenta que, según el informe de la Fundación Apertura, “alrededor del 50 por ciento de los recursos de los municipios y comunas de Santa Fe provienen de la coparticipación provincial”.
De hecho, en el marco del conflicto entre la Municipalidad de Rosario y sus empleados, que ya realizaron un paro en reclamo el 20 por ciento de aumento salarial, el secretario de Hacienda local, Carlos Fernández, sostuvo en repetidas ocasiones que será imposible hacer frente a la demanda sindical si no aumentan las partidas de la coparticipación. Algo similar pasa en Santa Fe, donde la Secretaría de Hacienda dice que con los ingresos actuales sólo alcanza para pagar sueldos.
Para la Fundación Apertura, “las continuas alteraciones del sistema de coparticipación federal, las modificaciones en el sistema de coparticipación provincial, y los avatares económicos de nuestro país, han sometido a los municipios a un proceso de erosión de ingresos muy fuerte que de mantenerse provocará a corto plazo su desfinanciación”.
Y enumera las razones:
1) “El congelamiento de los avalúos de los impuestos inmobiliarios y patentes que son los impuestos que más se coparticipan a los municipios y comunas, pero que inciden escasamente en las finanzas provinciales, por lo que las administraciones no los modifican desde 1991”.
2) “Las excepcionalidades del sistema de coparticipación federal que le quitaron fondos a las provincias, y éstas en forma ampliada se los quitaron a los municipios.
Por ejemplo, las sumas fijas que el Estado nacional le transfiere a las provincias no son coparticipados a los municipios, lo mismo que las sumas fijas para atender la Caja de Jubilaciones provincial, y otras partidas”.
3) “Las excepcionalidades que introdujo la provincia de Santa Fe en sucesivas administraciones sobre el sistema de coparticipación provincial atenuó el incremento de la recaudación que debería haber transferido. Es así que el incremento de los montos transferidos a municipios desde 2002 a valores históricos han aumentado un 95%, menos que lo que aumentaron los sueldos, servicios e insumos que deben afrontar. Y es mucho menor al crecimiento de los fondos provinciales que se incrementaron 152%. A eso le agregamos los topes decididos por la administración provincial en los montos a coparticipar de ingresos brutos”.
Según el informe “todos estos elementos completan un presente y un futuro de enorme debilidad fiscal para los municipios y comunas, que dependen de partidas extraordinarias sujetas a la voluntad del la administración provincial”. Y se sabe, todos los municipios y comunas son iguales, pero algunos son más iguales que otros.
