Víctor Manzanares, ex contador de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, fue aceptado finalmente ayer como un nuevo arrepentido en la causa por los cuadernos de la corrupción por parte del juez federal Claudio Bonadio, quien homologó el acuerdo al que llegó con la fiscalía.

Manzanares seguirá por el momento detenido con prisión preventiva en esta causa y en la conocida como “Los Sauces”.

El 5 de febrero último, el profesional declaró ante el fiscal Carlos Stornelli y aportó detalles sobre operaciones del matrimonio vinculadas a sus propiedades y cómo se manejaron ante una denuncia por enriquecimiento ilícito que fue cerrada. También aportó información sobre la compra de hoteles por parte de Kirchner y de un supuesto testaferro, Osvaldo Sanfelice.

El ex contador dijo que esos temas los habló directo con el fallecido ex presidente. “Me dijo que yo iba a manejar esos dos hoteles y que por ello iba a ganar 40.000 dólares mensuales”.

También sostuvo que “por indicación de Néstor Kirchner” hizo trámites vinculados al hotel Waldorf, en el barrio porteño de Retiro, un establecimiento ubicado en la calle Paraguay al 400 que figuraba a nombre de Sanfelice pero que la Justicia sospecha era del ex presidente.