La Cámara de industrias electrónicas (Cadieel) denunció la existencia de productos puestos a la venta que no cumplen con la certificación de seguridad eléctrica, y que para la entidad representan un "peligro" para los consumidores.

Se trata de productos ilegales como los "adaptadores" y toma corrientes de dos pernos redondos (los conocidos como de "dos patitas") que "están expresamente prohibidos", y de los cuales se venden anualmente medio millón de unidades, según la denuncia de la cámara.

Remarcaron que "según la Superintendencia de Bomberos de la Policía Federal, el 40 por ciento de los incendios producidos en el año 2006 en esta ciudad tuvieron su origen en desperfectos eléctricos, y otros estudios privados estimaron que cada año se producen 1.500 muertes por causas eléctricas".

La cámara ofreció a la Subsecretaría de Lealtad Comercial su asesoramiento para detectar tanto en pequeños comercios como en grandes superficies de venta, la existencia de productos que no cumplen con la resolución 92/98 de Seguridad Eléctrica.

La venta de este tipo de productos "es un riesgo para los consumidores porque los dispositivos que adquieren pueden fallar poniendo en riesgo sus vidas y bienes", afirmó la entidad en un comunicado. "Nos preocupa que se permita la comercialización de estos productos que no resisten ningún ensayo o que no cuentan con las certificaciones pertinentes", subrayó el titular de Cadieel, Ramiro Prodan.

La resolución 92/98 mencionada establece las condiciones mínimas de Seguridad que debe cumplir el equipamiento eléctrico de baja tensión para su comercialización en la Argentina.

Allí se menciona que todo el equipamiento eléctrico de baja tensión que se comercializa en la Argentina debe satisfacer los “Requisitos Esenciales de Seguridad” detallados, prácticamente iguales a los establecidos en la Directiva Europea de Baja Tensión (CEE 73 / 23). En el caso de las fichas y tomacorrientes, además deben tener el formato IRAM. 2063 o 2073 según corresponda a la clase de aislación.

“Uno de los derechos que tenemos como consumidores se refiere a la seguridad”, afirman en Adelco (Acción del Consumidor). “Las cosas y servicios deben ser suministrados o prestados en forma tal que, utilizados en condiciones previsibles o normales de uso, no presenten peligro alguno para la salud o integridad física de los consumidores o usuarios”.

“Sin embargo –agregan– con mucha frecuencia se oye hablar de accidentes originados en cortocircuitos o desperfectos eléctricos que no sólo afectan bienes económicos sino, lo que es más preocupante la salud de consumidores desprevenidos”.

Desde el primer análisis comparativo sobre Fichas, triples y adaptadores –realizado en el año 1986 donde se advertía sobre el potencial peligro que representaba la utilización de estos productos– Adelco se ha preocupado en difundir la normativa vigente e informar sobre los recaudos que hay que tomar al momento de realizar la compra de este tipo de productos.