De no creer. El piquetero Luis D´Elía apoyó hace casi catorce años, precisamente el 7 de abril de 1994, a Domingo Cavallo. Fue a través de una carta que envió al entonces ministro de Economía Domingo Cavallo.  La misiva habla loas de las políticas implementadas por el economista y cuenta con la rúbrica de otro militante social: Juan Carlos Alderete.

D’Elía --que comenzó su actividad sindical en el gremio docente bonaerense, ya que es maestro de EGB-- comenzaba aquella misiva con una descripción de la debacle hiperinflacionaria que se llevó puesto al ex presidente Raúl Alfonsín en 1989, desde el punto de vista de “los dirigentes de las villas y los asentamientos.”

“Señor ministro de Economía y Obras y Servicios Públicos de la Nación doctor Domingo Felipe Cavallo. Presente. De nuestra mayor consideración: Con seguridad, 1989, quedará sin duda marcado en la historia de los argentinos, como el tiempo en que estallaron todas las variables económicas y la hiperinflación invadió la vida, la historia y las costumbres de los ciudadanos. La inmoralidad se puso el ropaje de la especulación y amenazaba con quedarse a vivir para siempre entre nosotros. Los dirigentes de las villas y los asentamientos multiplicábamos nuestros esfuerzos hasta el infinito. Todavía podemos recordar vivamente las largas y difíciles charlas con los compañeros, tratábamos de disuadirlos de cometer actos irracionales, como los saqueos de San Miguel y La Matanza”, reza el escrito.

Hasta ahí se percibe en el escrito de D’Elía cierta coherencia ideológica con la denuncia clasista sobre cómo afectó a los sectores más postergados de nuestra sociedad.

Pero D’Elía, termina por sorprender: “La estabilidad económica, el acceso a determinado tipo de crédito, la movilización de la obra pública (en particular en los barrios marginales), el fenomenal ordenamiento de la economía son… una conquista irreductible que Pueblo y Gobierno hemos alcanzado juntos, con la conducción política del Presidente Menem y con la invalorable pericia técnica de usted ( Cavallo) y su equipo de colaboradores.”

Pero D’Elía tenía “Esperanzas” (con mayúsculas) en el Plan de Convertibilidad, y al igual que los sectores ubicados en el polo opuesto del arco ideológico del piquetero, invitaba a Cavallo a “no dejarse desalentar por las voces del pasado”.

Y así concluye la carta que demuestra que ni D´Elía resiste un archivo: “Sepa usted que puede contar con nosotros, que desde los humildes podremos hablar de sentir y de las necesidades de nuestro pueblo, para arrancarles las caretas a aquellos que con deshonestidad intelectual y desde las comodidades de la pequeña burguesía intentan hundirnos en la desesperanza y quebrar nuestro desarrollo como Nación. Fraternalmente, Luis Angel D’Elía (DNI 12.894.313) / Juan Carlos Alderete (DNI 10.539.167)”.