"Mi posición es de defensa de la vida hasta las últimas consecuencias, pero respetando las libertades individuales". La ministra de Salud de la provincia, Silvia Simoncini, intentó explicar este lunes a la mañana por qué Santa Fe no firmó el documento del Consejo Federal de Salud que apoyó lo actuado por las autoridades sanitarias de las provincias de Mendoza y Buenos Aires, donde se realizaron abortos a chicas discapacitadas que habían sido violadas. La funcionaria dijo que más allá de su posición personal, la firma comprometía una postura institucional que ella no creyó oportuna.

"La despenalización del aborto es un tema que debe abrirse a debate. Mi posición es de defensa de la vida hasta las últimas consecuencias y acá se trata de la interrupción de la vida de un ser humano", afirmó Somincini en diálogo con Radio 2.

De todos modos, aceptó que en casos como el de Mendoza y La Plata, "si fracasaron todas las instancias previas hay que cumplir la ley". Se referia al Código Penal, que acepta el aborto en estos casos.

La ministra insistió en que "el mejor acompañamiento a una familia es porteger la vida de la madre y del niño, pero si finalmente la decisión de la familia es otra el Estado lo debe aceptar".

En ese sentido, defendió la ley de salud reproductiva de Santa Fe y dijo que la provincia pone "todos sus esfuerzos" para el "acceso libre y voluntario a mecanismos a favor de la vida".