Arriba, los ventanales amplios relucientes, la vista al río y el lujo de las torres de Puerto Norte. Abajo, dos hombres demuelen con mazas una preciaria estructura de ladrillos y chapas, que funcionaba como un kiosco de venta de drogas hasta este jueves.
El contraste social a veces arroja imágenes disparatadas. Como la de este viernes a la tarde en Junín y Francia. Allí personal policial, municipal y de la provincia demolieron, en un operativo en conjunto, un búnker de drogas ubicado a unos 100 metros de los edificios Dolfines, los más caros de la ciudad.
En ese lugar que fue desmontado se realizó el miércoles pasado un operativo y efectivos de la división antidrogas secuestraron 1,2 kilo de carbohidrato de cocaína y 300 gramos de marihuana, todo listo para el consumo. Además, fue detenida una persona mayor de edad que se encontraba en el lugar.
Como ocurrió con otros casos en la ciudad, la provincia ordenó demoler el luger. La acción fue impulsada, de manera coordinada, por la secretaría de Seguridad Comunitaria, Defensa Civil, la dirección General de Prevención y Control de Adicciones (DGPCA), el Cuerpo Guardia de Infantería y Seguridad Ciudadana de la municipalidad de Rosario.
El secretario de Seguridad Comunitaria, Ángel Ruani, declaró que “siguiendo con la línea marcada por el gobernador Bonfatti, no vamos a cejar en la lucha contra el narcotráfico y la delincuencia; puesto que creemos que éste es el camino que hay que seguir para terminar con este flagelo”.
Asimismo, Ruani destacó la importancia del trabajo coordinado entre las fuerzas señalando que “cada vez que hacemos este tipo de operaciones, es fundamental contar con ellos para poder llevar a cabo nuestro objetivo que es el de terminar con los lugares de venta de drogas”.
