Claudia Bonato
“El Centro Inti-Plásticos, en conjunto con el Centro de Investigación de Plagas e Insecticidas (Cipein-Conicet), trabajan en la elaboración de un dispositivo que permite controlar los mosquitos vectores del dengue, con altos niveles de eficiencia y baja toxicidad. La innovación fue recomendada por la Organización Mundial de la Salud.
“La herramienta consiste en ovitrampas larvicidas que interrumpen el desarrollo de la larva a mosquito adulto, tarea que hasta ahora era ineficiente y que es fundamental para controlar el dengue”, explicó en diálogo con Rosario3.com la coordinadora de la Unidad Tecnología de Materiales del Centro de Plástico del Inti, Patricia Eisemberg, y remarcó que “las principales acciones para interrumpir la transmisión de esta enfermedad son el control del vector por medio de rociados especiales para la eliminación de mosquitos adultos y la aún más importante tarea de eliminación de los criaderos acuáticos de las larvas (sitios de oviposición del mosquito hembra)”.
Las ovitrampas son recipientes plásticos donde las hembras grávidas de mosquitos colocan sus huevos. A partir de entonces, el dispositivo libera un larvicida que permite controlar las formas larvarias acuáticas de este insecto, impidiendo la dispersión de los mosquitos adultos que eclosionan de los huevos puestos en estos dispositivos. Como tienen muy bajo impacto ambiental, pueden ser utilizadas por la comunidad y pueden introducirse en tanques de agua.
Se trata de herramientas utilizadas cada vez con mayor frecuencia en distintas localidades, para monitorear poblaciones de mosquitos con fines de recolección de muestras o de vigilancia y que permiten detectar infestaciones relativamente bajas de mosquitos.
“Ahora estamos trabajando en las características del dispositivo para hacerlo más atractivo a las hembras del mosquito, ya que el objetivo es que depositen sus huevos en la ovitrampa y no en cualquier otro recipiente que contenga agua”, describió Eisemberg y dijo que en octubre próximo se desarrollarán las pruebas a campo, en poblaciones de Jujuy. “Si esas pruebas resultan positivas, se harán los ajustes necesarios y ya estaríamos en condiciones de lanzar una versión preliminar del producto al mercado”, afirmó.
Todos contra el mosquito
Esta iniciativa es complementaria de un nuevo tipo de formulación fumígena ya desarrollado: una tableta que libera en forma de humos un principio activo que elimina las formas adultas voladoras del mosquito y un larvicida que actúa sobre sus formas inmaduras.
Tanto la ovitrampa larvicida como la tableta fumígena pueden ser usadas en forma segura por el morador en su vivienda para controlar al mosquito Aedes Aegypti y abren la posibilidad de una nueva estrategia de control del dengue con participación comunitaria. Esto resulta fundamental ya que esta especie de mosquito tiene hábitos domiciliarios, por lo que la transmisión del dengue resulta predominantemente doméstica.
En esta línea, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que las acciones de control y saneamiento del mosquito vector del dengue tiendan al involucramiento de la propia comunidad.
En la actualidad, existen productos no profesionales para el mercado "domiciliario-sanitario", tales como aerosoles o espirales, pero ninguno de ellos es apto para controlar eficiente e integralmente al mosquito vector. Por tal razón, no son utilizados en las campañas gubernamentales de control y no existen programas comunitarios basados en estos productos.
Las nuevas herramientas desarrolladas por el Inti y Cipein han demostrado alta efectividad para el control del mosquito y amplia aceptación para la participación comunitaria. Tanto la pastilla fumígena, que libera en humos al compuesto activo (larvicida) con eficiencia mayor al 95%, como las trampas plásticas que contienen el compuesto activo en su formulación, y lo liberan de forma controlada desde el plástico hacia el agua de cría con una eficacia residual mayor a un año constituyen una valorable innovación.
Anteriormente, los tratamientos con formulaciones que actúan como larvicidas en reservorios acuáticos de larvas de mosquitos se veían afectados en su efecto de control por la dilución por lluvias y por la renovación y el uso que el hombre hace de muchos de estos reservorios con la consiguiente pérdida de formulación.
El nuevo desarrollo de Inti-Plásticos y Cipein presenta una alta selectividad y bajo impacto ambiental y en la salud pública. El larvicida contenido en el material plástico de la ovitrampa es un compuesto que actúa interfiriendo el paso de larva a mosquito adulto. Presenta una alta selectividad, muy baja toxicidad en mamíferos y ha sido recientemente recomendado por la Organización Mundial de la Salud para ser utilizado en control de larvas de mosquitos en aguas de consumo humano.
El control del dengue
El dengue es una enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti con alrededor de 100 millones de casos por año en todo el mundo e incidencia creciente en la Argentina. Según el último informe del Ministerio de Salud de la Nación, entre diciembre de 2012 y mayo de 2013 se estudiaron 5.270 pacientes con síntomas compatibles con dengue, confirmándose 721 de ellos.
Una de las críticas fundamentales que actualmente se le hacen a los programas de control del mosquito Aedes Aegypti es la insuficiente eliminación de larvas dentro y fuera de las viviendas infestadas, lo que probablemente representa una de las causas mas importantes de fallas de control y reinfestaciones rápidas luego de los tratamientos.
En consecuencia, esta innovación, brindará un novedoso aporte que evitará la propagación del vector y permitirá el control de la enfermedad.