Investigadores de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Missouri, en Estados Unidos, han realizado un estudio durante un mes con alumnos de pregrado que pone de relieve que aquellos jóvenes que muestran signos de depresión tienden a utilizar Internet de forma diferente al resto. Un uso excesivo de servicios de archivos compartidos o navegar por la Red de forma aleatoria son algunos de los síntomas.

Según explica la Universidad en un comunicado, se trata del primer estudio realizado con datos reales sobre el uso de Internet, una forma mucho más precisa para evaluar los comportamientos en la red de redes.

A partir del mismo, sus precursores pretenden desarrollar un software capaz de controlar el uso de Internet y alertar al usuario sobre si sus patrones de comportamiento en la red revelarán síntomas de depresión. “El software sería una herramienta casera y rentable que podría incitar a los usuarios a buscar ayuda médica si sus patrones en el uso de Internet indicaran una posible depresión”, explica el doctor Sriram Chellappan, profesor asistente de Informática en Missouri e investigador principal de estudio.

En concreto, los estudiantes deprimidos tendían a utilizar servicios para compartir archivos, enviar correos electrónicos y chatear con más frecuencia que los demás compañeros. También solían usar más “paquetes por flujo”, es decir, aplicaciones que requieren gran ancho de banda, asociadas normalmente con videos y juegos online.

Asimismo, estos jóvenes tendían a usar Internet de una manera más “aleatoria” –pasando de una a otra aplicación con frecuencia, de los juegos al chat o al correo electrónico. Chellappan piensa que este uso aleatorio puede indicar problemas de concentración, una característica asociada con la depresión.

Con el análisis conjunto de todos los datos obtenidos, los investigadores llegaron a la conclusión de que los estudiantes identificados previamente con síntomas de depresión utilizaron Internet de manera diferente al resto. Basándose en la Escala de Depresión del Centro de Estudios Epidemiológicos (CES-D), un 30% de los participantes en el estudio cumplió los criterios mínimos para la depresión. A nivel nacional, estudios previos demostraron que entre el 10 y el 40% de todos los estudiantes estadounidenses sufre depresión.

Sin embargo, a diferencia de los anteriores, el de Missouri es el primero que utiliza datos reales, recogidos discretamente y de forma anónima, para asociar el uso de Internet con signos de depresión. La investigación previa se ha basado en encuestas, “un mecanismo mucho menos preciso para evaluar cómo la gente usa Internet”, asegura Chellappan.

“Esto se debe a que cuando se pregunta a los estudiantes sobre su volumen y tipo de actividad en Internet, la información que se aporta es limitada, debido a que los recuerdos se desvanecen con el tiempo”, matiza el profesor. “Puede haber errores y sesgos de conveniencia social cuando los estudiantes informan sobre su propio uso de Internet”, añade. El sesgo de deseabilidad social se refiere a la tendencia de los encuestados a responder de una forma que sea valorada de forma positiva por los demás.

Fuente: Tendencias 21