El titular de la Auditoría General de la Nación (AGN), Leandro Despouy, dijo que lo que busca el oficialismo con el intento por desplazarlo es “beneficiar a funcionarios que están siendo juzgados y procesados” por la investigaciones del organismo, entre ellos los ex secretarios de Transporte Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi.

Por eso, en diálogo con el programa A diario, de Radio 2, consideró que sería “muy grave” convalidar la postura del Frente para la Victoria: “Si aceptamos la teoría de que dos años fui trucho muchos corruptos de este país van a a estar de fiesta”.

Pero además, dijo que la maniobra también apunta a frenar investigaciones en marcha, entre ellas sobre Aerolíneas y Ciccone.

“Esta violación no hubiera existido sin mis informes categóricos sobre esta gestión”, enfatizó y remarcó que constitucionalmente e corresponde ocupar el cargo mientras la UCR, que fue quien lo puso, sea el partido de la oposición con mayor representación parlamentaria. Y que, tal como lo indica la Constitución, cederá el puesto cuando esa situación cambie.

“Acá no hay problema reglamentario, sino una sublevación institucional motivada por objetivos políticos”, agregó y dejó en claro: "Voy a resistir; esta es una maniobra de gravedad institucional".

El kirchnerismo planteó ayer que el mandato de Despouy había vencido en 2010 y que la UCR debía presentar de nuevo un candidato. El titular de la bancada del Frente para la Victoria en el Senado, Miguel Ángel Pichetto, sostuvo que “la propia torpeza” del radicalismo la que determinó esto.

Pero tanto Despouy como sus compañeros radicales sostienen que la comisión no posee la facultad de separarlo. “No me han sacado porque no me pueden sacar. Si lo hicieran sería una violación de la Constitución”, afirmó.

Despouy explicó que su mandato fue "ratificado en múltiples oportunidades” y notó que incluso "la comisión se dirige a mí como presidente”. “La incompetencia (de la comisión) es tan manifiesta que si yo pudiera ser removido por el oficialismo ya lo habrían hecho”, remarcó.