A pesar de que el año pasado se observó un descenso en las lesiones por pirotecnia, las visitas de urgencia al hospital durante las fiestas continúan preocupando a los especialistas.

Dentro del total de las cifras de lesiones en la época navideña, alrededor del 50% son personas menores de 15 años. “Las quemaduras en manos de niños de entre 1 y 5 años revelan una falta de control por parte de los adultos”, afirma el doctor Fernando Menvielle, especialista y Miembro Titular de la Asociación Argentina de Cirugía de la Mano y Reconstructiva del Miembro Superior. Se calcula que un niño tiene una posibilidad 10 veces mayor de lesionarse con un fuego artificial si no es supervisado.

Estas heridas ocurren con mayor frecuencia en las manos y los dedos (30%), los ojos (28%) y en la cabeza y la cara (15%), calculan los especialistas.

En cuanto al tipo de lesiones, los médicos coinciden en que las más frecuentemente observadas son las quemaduras en manos. “Alrededor del 60% de las lesiones son quemaduras, mientras que contusiones y laceraciones son las segundas más frecuentes”, explica el doctor Fernando Menvielle, también especialista de la Asociación Argentina de Ortopedia y Traumatología.

“Las heridas son de tal gravedad que incluso pueden lesionar los huesos o producir la pérdida de manos o de uno o varios dedos”, advierte Menvielle. La causa más común y que afecta al más alto porcentaje que representan los niños es la falta de supervisión.

Teniendo, además, la curiosidad como uno de sus rasgos innatos, una manera en que los niños resultan heridos es acercándose demasiado al fuego artificial. Otra causa de este tipo de lesiones es la experimentación con pirotecnia “casera” o no autorizada.

Fuente: Pro Salud News