Un niño de 9 años presentó ante el Concejo Municipal una propuesta para que se garantice la asistencia médica inmediata a los alumnos que lo necesiten en los establecimientos educativos de Rosario. Y este jueves, el cuerpo legislativo dispuso por unanimidad elevar su proyecto al Ejecutivo municipal para que desde allí lo giren al organismo competente, el Ministerio de Educación de la provincia.
El gesto fue quizás lo más saliente de la sesión más breve del año –la última antes de las elecciones internas del domingo– que incluyó además otro punto consignado por el joven autor de la norma: Nicolás Alejandro Ferreira, alumno de la escuela Nº 801 Carmen Bafico.
Se trata de que los teléfonos particulares que funcionan en las escuelas tengan salida a los celulares privados, a fin de que si sucede algún imprevisto o accidente que justifique la comunicación con los padres de los alumnos, se los pueda llamar a sus móviles, algo que hoy es imposible en la mayoría de las escuelas públicas.
El decreto que fue aprobado esta tarde será remitido al Ejecutivo Municipal a fin de que previo contacto con el ministerio de Educación de la provincia, se implemente la medida propuesta por el alumno con celeridad.
Más de la reducida sesión
Como consecuencia de haberse reunido sólo dos comisiones –obras públicas y derechos humanos– a lo largo de la semana previa a los comicios del domingo, pocos proyectos llegaron al recinto.
El Concejo aprobó tres pedidos de informes del concejal Arturo Gandolla (Frente para la Victoria) referidos al destino que se le dará al viejo Hospital de emergencias Clemente Álvarez (Heca), el atraso en la concreción del centro de noche para albergar a los indigentes y el criterio que emplea el personal del SIES para ponderar la urgencia de los llamados recibidos (habida cuenta de la emergencia no atendida a tiempo –por considerar que se trataba de una broma– que terminó este mes con el saldo de una muerte.
Asimismo, quedó si tratamiento otro proyecto de ordenanza presentado por Gandola que propone que se multe a los automovilistas que envían mensajes de texto mientras manejan, ya que resulta, a juicio del edil, tan peligroso como hablar por celular.