No hace falta ser un experto para ver cómo desaparecieron las playas de la isla frente a Rosario, ni para advertir los peligros de derrumbe en la costa de la ciudad. De hecho, durante el diluvio de la última semana de marzo tres personas perdieron la vida tras ceder una casa instalada sobre la barranca a la altura de calle Moreno. Para los ambientalistas y algunos especialistas este fenómeno se da por el dragado sin control del Paraná. Por eso, el Concejo aprobó este jueves a la tarde un pedido de informe para conocer el estado de la profundización del cauce principal del río.
La iniciativa fue impulsada por el edil Nire Roldán y organizaciones ambientalistas que exigen obtener información sobre las tareas de dragado que se realizan en el canal del río Paraná. La medida radica en que la profundización del calado, llevándolo de 28 pies a 32, afecta el sistema de humedales que forman el río y sus islas. Además, señalaron que los estudios de impacto ambiental realizados son insuficientes y que nunca se creó el organismo de control correspondiente.
“Es necesario que se determine el impacto que dicha obra produce en las costas de Rosario habida cuenta de los serios deterioros que han sufrido las barrancas de nuestra ciudad tanto en la zona ribereña, en el parque España, como el parque de las colectividades, entre otros”, señala el proyecto aprobado.
Según describe el texto, las operaciones de draga para facilitar la navegación de grandes buques (decreto Nº 1106/97) las realiza en el tramo Santa Fe-Océano un concesionario privado constituido por capitales belgas y argentinos. En el tramo Santa Fe-Puerto San Martín, se profundizó a 22 pies y desde Puerto San Martín al Océano a 32 pies.
En este contexto y luego de que el propio gobernador Jorge Obeid manifestó la intención de continuar la profundización y llegar a los 42 pies; los ambientalistas están en alerta.
Esto provocaría “alteraciones en la morfología fluvial que pueden repercutir en la biodiversidad del río”, señala el proyecto. En ese sentido, el concejal Roldán destacó que "resultaría aconsejable no profundizar más la vía navegable del río en el tramo Santa Fe-Océano, hasta que no se presenten en tiempo y forma, y con la debida difusión y participación pública, los estudios de impacto ambiental que la legislación nacional exige".
Por eso, solicitó a la Dirección Nacional de Vías Navegables fotocopias autenticadas de los informes ambientales que se encuentren en su poder, en especial sobre el impacto del dragado del río Paraná en las costas y la fauna de las islas y el río. Y por otra parte encomendó, a la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables de la Nación que informe los motivos por los cuales no se ha creado hasta la fecha el Órgano de Control, tal como lo estipula el Art. 12 del Decreto 863/93, que debía tener su cargo la supervisión e inspección técnica y ambiental y auditoría económica -administrativa, contable y legal de las obras que se realizan en la Hidrovía Paraná Paraguay.
Los humedales en peligro
Desde el Taller Ecologista se insiste desde hace tiempo con el peligro que corren los humedales, que es un sistema vital que forman el río Paraná y sus islas.
“Los humedales son indispensables para nuestra vida, ya que retienen contaminantes y sedimentos, con lo cual purifican el agua. También sirven para controlar inundaciones, amortiguando su impacto directo, y contienen una gran biodiversidad, entre la que se cuenta el hecho de que nos otorgan gran variedad de peces”, explican los ambientalistas.