La meditación, el yoga o el tai chi como disciplinas que se enfrentan al ritmo acelerado que caracteriza este tiempo necesitan de espacios donde realizarse. Y mejor aún si se puede disponer de espacios públicos y al aire libre, como lo es por ejemplo el parque Sunchales. Con ese espiritu, el concejal Edgardo Falcón presentó un proyecto para crear el “Programa Municipal de Zonas Calmas de Rosario".

La iniciativa encomienda la delimitación de la primera zona en el espacio emplazado en el parque Sunchales, al este los silos David y frente al río Paraná. En la actualidad, ese espacio ya es utilizado para la realización de actividades que se encuadran dentro del “Movimiento Slow”, filosofía que se expande en el mundo y que “lucha contra la tiranía del reloj”.

La idea del edil socialista es tomar esa movida que ya existe y llevarla a otros espacios mediante el programa de zonas calmas. El mismo contribuiría con su ordenamiento “a una mejor utilización del espacio público y al respeto y tolerancia hacia aquellas personas que optan por esta forma de vida y de relacionarse con la naturaleza”.

Además de Falcón, el proyecto cuenta con las firmas del presidente del cuerpo, Miguel Zamarini, y de sus pares de bancada Orlando Debiasi y Pablo Colono.

Aguante el caracol

El proyecto plantea la “necesidad de aparcar la prisa y disfrutar de cada momento de la vida, en contacto con la naturaleza, al aire libre, en paz y armonía, disfrutando del deporte y de diferentes disciplinas como  la meditación, el yoga y el tai chi, entre otras”.

El artículo tres del proyecto de ordenanza pide que se institucionalice como “imagen del programa un logotipo que incluya: la imagen de un caracol, el color naranja y la leyenda «Zona Calma»”.

Falcón y los socialistas slow se permitieron también emplear dos citas en el texto. “En la vida hay algo más importante que incrementar la velocidad”, dijo Gandhi. Y cierra con Francis Bacon: "Escoger el propio tiempo es ganar tiempo".