El extracto lipídico de tomate rojo revierte la Hiperplasia Prostática Benigna (HPB) o agrandamiento de la próstata. Además, mejora la regeneración de la microarquitectura celular de este órgano, disminuye los marcadores de estrés oxidativo y normaliza la presión arterial.

Los descubrimientos fueron realizados por científicos mexicanos del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), y surgieron a raíz de la experimentación con ratas de laboratorio durante tres meses, a las que previamente se les había inducido la HPB.

Al aplicarles el extracto, "se observó su capacidad para reducir la inflamación y el crecimiento de este órgano", según indicaron en un comunicado y consignó el portal Doc Salud. Lo que aclararon los investigadores es que los beneficios son obtenidos a través del extracto ya procesado y estandarizado.

Los síntomas de la HPB son variados y van desde la retención urinaria, dificultad o dolor durante la micción, a la sensación repetida de querer orinar sin lograrlo. Se presenta en la mayoría de los hombres mayores de 40 años, y se exacerba entre los obesos. Si no se atiende a tiempo, puede requerir de una operación.

Este extracto lipídico de tomate fue ampliamente estudiado por sus efectos anticancerígenos, entre los que figura la disminución de la metástasis en cáncer de próstata.