El gobierno de facto de Honduras rompió relaciones con la Argentina y decidió expulsar a los diplomáticos en respuesta al apoyo que manifestó el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner al depuesto presidente Manuel Zelaya. Antes, la administración kirchnerista desconoció a la embajadora hondureña, Carmen Eleonora Ortez Williams.

"La relación diplomática entre Honduras y Argentina se canalizará a partir de esta misma fecha por medio de la embajada de Israel en Buenos Aires", señaló la Cancillería hondureña en un comunicado.

El gobierno de facto de Roberto Micheletti le dio a los diplomáticos argentinos 72 horas para que abandonen Tegucigalpa, tal como hizo el Buenos Aires con la embajadora Ortez Williams la semana pasada, después de que ésta expresara su apoya a Micheletti. La decisión argentina fue comunicada por el canciller Jorge Taiana tras una reunión que mantuvo en Quito con Zelaya.

El mandatario depuesto desacreditó a unos 20 diplomáticos por respaldar a Micheletti, desde que fue derrocado el 28 de junio, especialmente en Estados Unidos, México y Centroamérica.

La Cancillería hondureña dijo que ya notificó al Ministerio de Relaciones Exteriores y la oficina de Comercio Internacional de la Argentina. Es el segundo país al que Honduras aplica la misma medida; el primero fue Venezuela, que aún mantiene a uno de sus funcionarios en Tegucigalpa porque alega que reconoce como presidente a Zelaya y no a Micheletti.