El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, defendió la ley que permite al gobierno hacer cambios en el presupuesto y aseguró que "administrar" es una atribución del Ejecutivo y no del Parlamento. El proyecto había sido criticado duramente desde la oposición. Y el presidente de la bancada de diputados nacionales del ARI, Eduardo Macaluse, dijo, en declaraciones a Radio 2, que se trata de "una reforma constitucional por decreto" y que se utiliza el fervor que genera el fútbol como maniobra de distracción. "De lo que se trata es de administrar y el Poder Legislativo dicta normas, pero no está llamado a administrar", afirmó el jefe de Gabinete en declaraciones formuladas a Radio Continental. Agregó que "es absurdo" que el Parlamento impida al Ejecutivo "recurrir a fondos que no están siendo utilizados para afectarlos a situaciones que sí se vuelven necesarias" y recordó que el Ejecutivo "tiene que rendir permanentemente cuentas al Legislativo, porque éste ejerce siempre un control presupuestario". Anoche, el gobierno elevó al Congreso un proyecto de reforma a la ley de administración financiera y de los sistemas de control del Sector Público, que faculta al jefe de Gabinete de Ministros a disponer las reestructuraciones que considere necesaria en el presupuesto nacional. La iniciativa, que lleva la firma del presidente Néstor Kirchner; el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y la ministra de Economía, Felisa Miceli, contempla la sustitución del artículo 37 de la ley 24156 sancionada en 1992, en la que se establece alcances y mecanismos para efectuar las modificaciones de la ley de presupuesto durante su ejecución. El artículo original dispone que esas modificaciones corresponden en exclusiva al Congreso, mientras que la propuesta de reforma amplia al jefe de Gabinete la posibilidad de "disponer las reestructuraciones que considere necesarias dentro del total aprobado por cada ley de presupuesto, quedando comprendidas las modificaciones que involucren a gastos corrientes, gastos de capital, aplicaciones financieras y distribución de las finalidades". "Esto es una reforma constitucional por decreto que lo único que persigue es quitarle al Congreso la facultad de controlar las cuentas del Estado", se quejó Macaluse, quien además acusó al gobierno se utilizar el "fenómeno de masas" que es el fútbol para, unas horas antes del partido con Alemania, presentar un proyecto de "tanta importancia".