La primera clínica en el mundo exclusiva para pacientes cibernéticos abrió sus puertas en la ciudad japonesa de Osaka bajo el auspicio del doctor Kazuhiro Ono, experto en robótica y con gran experiencia en este sector.

En efecto, de ahora en más, propietarios de robots podrán dormir tranquilos pues desperfectos o achaques mecánicos podrán ser reparados en la Akazawa Robot Clinic del doctor Ono, quien se hace llamar por sus pacientes: "robodoctor".

Según informó la agencia Ansa, el "robodoctor" explica que la estructura por él dirigida no es un vulgar centro de reparaciones, como se podría pensar, sino "propiamente una verdadera clínica para ciberpacientes".

Esta clínica tiene el aspecto de una oficina mecánica, pero la organización de los espacios recuerda a un hospital convencional.

El recorrido comienza en la guardia, donde el enfermo de turno es convenientemente revisado y recibe un diagnóstico clínico.

Luego, en la primera visita (que tiene un costo de 5.000 yenes, unos 34 euros) se revisan los síntomas y a ello le sigue la internación.

Tras la operación (terminantemente prohibido hablar de "reparación") el robot-paciente es trasladado a la sala Rihabiri (rehabilitación), donde se controla detenidamente el resultado de la intervención antes de enviar (mediante paquete postal) al paciente a su casa.

Los síntomas más frecuentes de los robots dañados están ligados principalmente al mal funcionamiento de los componentes que trabajan en la parte motora, explica Ono.

"El tiempo medio de internación, salvo casos realmente muy graves, es de alrededor de una semana. Estamos listos para intervenir sobre la casi totalidad de los robots presentes en el mercado con la máxima profesionalidad que deriva de una experiencia de más de una década", aclara Ono.