Un adolescente murió por sobredosis de pegamento en el hospital Carrasco. Hasta allí fue llevado por unos amigos con los que estaba al momento de perder el conocimiento tras consumir esta sustancia tóxica. El caso no es aislado. Según Natalia Gastaldi, médica de guardia de ese centro de salud, "son muchos los chicos que llegan, preferentemente durante los fines de semana, con cuadro de taquicardia, temblores y palpitaciones y que declaran consumir alcochol y pegamento, que es lo más económico". En su mayoría tienen entre 13 y 25 años e ingresan al hospital de viernes a domingo.

Nicolás G., de 14 años, perdió su vida esta madrugada a causa de una sobredosis provocada por la inhalación de un pegamento de venta libre en cualquier kiosco que se utiliza para reparar gomas de bicicletas.

El joven estaba acompañado por unos amigos en Ituzaingo y Pascual Rosas consumiendo pegamento cuando comenzó a sentirse mal y perdió el conocimiento. Los chicos llamaron a la madre del menor que lo encontró tirado en la vía pública a unas dos cuadras de su casa.

Con ayuda del Sies los amigos y la madre del chico lograron trasladarlo al hospital Carrasco, adonde según Gastaldi el menor llegó sin signos vitales. 

Según fuentes policiales, la madre de Nicolás reconoció que desde hace tiempo el chico consumía ésta y otras sustancias con frecuencia.

Pero el caso de Nicolás no es un hecho aislado. La guardia del hospital Carrasco, como la de la mayoría de los centros de salud públicos de la ciudad, recibe chicos con de entre 13 y 25 años con cuadros  de taquicardia, temblores y palpitaciones y que declaran consumir alcochol y estupefacientes. "Llegan en mayor cantidad los fines de semana, donde se produce el pico de ingresos desde el viernes al domingo", señaló Gastaldi.

"Cuando hablamos con ellos, como tienen miedo de esos síntomas, relatan lo que consumen. En la mayoría de los casos es alcohol, mezclado con pastillas, cocaína, paco y pegamento", dijo la médica. Y agregó: "Como son combinaciones que afectan al sistema cariiovascular lo primero que hay que hacer es un electro. Después de esa atención médica lo que se hace es derivarlos con una asistente social o una psicóloga para ver encarar un tratamiento".

Por su parte, Laura, la mamá de Nicolás, reconoció en declaraciones al periodista Pablo Procopio de Radio 2 que hasta hace poco recorrió distintos juzgados para obtener algún tipo de ayuda para la atención de su hijo que consumía sustancias tóxicas desde los doce años. "Quería rehabilitación para mi hijo y no tuve respuestas, hace una semana me dijeron que me iban a llamar para ver que podían hacer y ahora mi hijo ya está muerto".

Los menores consumen más

Un informe realizado por el Programa de Prevención de Adicciones de la Municipalidad y difundido a fines de agosto por Rosario3.com señala que la edad de inicio del consumo de drogas entre las personas en tratamiento es entre los 12 y 14 años, mientras que para los usuarios en situación de calle, la edad de inicio varía entre los 8 y los 11 años. En el primer grupo la sustancia de inicio es el alcohol, mientras que en el segundo optan por la marihuana.

La investigación-acción se desarrolló entre 2004 y 2006 y forma parte de un trabajo que se viene realizando en los barrios a través de los centros Crecer y otras organizaciones y si bien es el primero que encabeza el municipio posibilitó el acceso a los datos que manejan las instituciones que trabajan en esta problemática. Todas coincidieron en que en los últimos 10 años bajó la edad de ingreso al consumo de drogas y al mismo tiempo creció la gravedad de la situación.

Entre las personas que están en tratamiento las drogas más frecuentes son: marihuana, alcohol, psicofármacos, cocaína, pegamento, naftas, ácidos, éxtasis, heroína, morfina, crack y otros fármacos. Por su parte, entre los usuarios en situación de calle, las sustancias más frecuentes son: marihuana, pegamento, inhalantes, cocaína, alcohol, en menor proporción psicofármacos y alucinógenos.