El que quiere Riquelme, que le cueste. La posibilidad de que Román continúe su carrera en Rosario Central volvió a aparecer en forma de rumor este miércoles, en base a algunos datos objetivos: las trabas que aparecieron para que el enganche vaya a Brasil, la decisión de Boca de trabar todo lo que pueda que recale en un club de la primera local que pueda llevar a que aparezca en la Bombonera con la camiseta diez de otro equipo, y la amistad entre el jugador y el técnico Miguel Angel Russo. Aunque hay un problema: Boca pide 2.100.000 dólares para permitir que vaya a otro club de la Argentina.
Aunque quizá pueda entrar en una negociación en el marco de la discusión de varios asuntos pendientes que aún tienen Boca Juniors y el club de Arroyito: deben arreglar la situación de Jesús Méndez y Damián Díaz.
Por lo pronto, Boca Junios planteó que el club que quiera tener al jugador en su equipo deberá desembolsar 2 millones 100 mil dólares por su pase. Nada barata la cláusula de rescisión del contrato de quien fuera su estrella. A su vez, Riquelme le demanda a Boca una deuda de un millón 300 mil pesos. En una reunión de comisión directiva realizada este martes por la noche, nada logró resolverse.
En tanto que Rosario Central quiere que Méndez, cuyo pase es de Boca, siga a préstamo en su equipo durante el torneo a iniciarse. El pase venció el 30 de junio pero la intención es extenderlo. Otro punto en conflicto es el pase del ex jugador canalla Damián Díaz: mitad de Boca, mitad de Central. La idea de la comisión directiva canalla es cobrar la mitad del pase de Díaz (o venderlo al exterior, más concretamente Ecuador) y con ese dinero pagar el préstamo de Méndez.
Pero algunos insisten: quizá en la negociación de ambos pases se pueda colar Riquelme. Por ahora, un escenario que se siente lejos pero posible.
