En el primer piso de una casa a cuatro cuadras de Pellegrini –la planta baja está consagrada a los ensayos, y la batería, micrófonos y demás instrumentos sólo se mueven para los shows– está la biblioteca de Eugenia Craviotto, la cantante de Mamita Peyote. Los libros conviven con discos y son casi todos usados.

Para Eugenia el olorcito de un libro que pasó por otras manos tiene algo de magia y por eso prefiere el contacto del papel antes que la fría pantalla del e-reader. “El romanticismo del libro es irreemplazable”, asegura. Le gusta marcarlos, escribirlos, hacerlos suyos.

Su mamá, conocida periodista de la ciudad, fue –y es– la gran asesora de títulos. Muchos de ellos los encontró en la biblioteca popular de Firmat, la localidad donde se crió, y que atesora uno de sus libros favoritos, “Todos los hombres son mortales” de Simone de Beauvoir, fuente de inspiración, a su vez, para una de las canciones del último disco de la banda, “Eterna”.

Fanática de Edgar Allan Poe, en una de sus repisas la esperan sus obras completas en inglés, un desafío que quiere asumir cuando tenga algo más de tiempo. ¿Qué recomienda para el Club de Lectura de Rosario3.com?