Los empresarios fraccionadores de gas licuado aseguran que el pedido de aumento salarial que hacen los sindicatos es “desmedido” y que “alguien va a tener que pagar” el incremento de sueldos ante la imposibilidad de las empresas de hacerlo. Por otra parte, aseguran que el stock se está agotando y que en las próximas horas comenzarán a faltar las garrafas en la zona.

Los trabajadores de las plantas fraccionadoras de gas licuado de petróleo realizan un paro por tiempo indeterminado en reclamo de un aumento del 25 por ciento.

Pedro Renda, el presidente de la cámara argentina de empresas del sector, aseguró que el pedido es “desmedido”. “Exigen un 25 por ciento más adicionales que terminarían sumando un 120 por ciento”, dijo el empresario y luego se preguntó: “¿Qué empresa puede trasladar un aumento salarial de este nivel?”.

“Un empleado de una empresa de fraccionamiento se lleva a su casa 3200 pesos por mes que no es un salario pésimo”, manifestó en diálogo con el programa Radiópolis de Radio 2.

Consultado por un eventual aumento en el precio de las garrafas al público o en la posibilidad de solicitar mayores subsidios al gobierno nacional, Renda aseguró que “ante el pedido desmedido de los sindicatos y la imposibilidad de las empresas de hacer frente al aumento, alguien lo tendrá que pagar”.

El empresario dijo que la actividad tuvo un repunte y la venta de garrafas creció alrededor de un 12 por ciento en comparación con el invierno pasado. Y en ese sentido, los stocks no están para abastecer al mercado por mucho tiempo. “En 48 ó 72 horas podría haber problemas en la distribución de garrafas”, concluyó.