Tres apellidos y sólo dos lugares. Ese es el dilema ante el que se encuentra el entrenador de Central, Ariel Cuffaro Russo, en cuanto a la conformación de la ofensiva para el choque del próximo viernes a las 17 ante Godoy Cruz en Mendoza. Es que se recuperó de su lesión Emilio Zelaya y el DT duda si devolverle la titularidad y, en ese caso, en lugar de quién.
Este martes, el plantel auriazul practicó en el Country de Arroyo Seco. Los futbolistas se dividieron en grupos por puestos para realizar trabajos tácticos: los arqueros trabajaron con el Rifle Castellano, los defensores bajo la supervisión de José Chamot y los atacantes junto al Polillita Da Silva, todos bajo la atenta mirada de Cuffaro.
Dos jugadores entrenaron en forma diferenciada: Mario Paglialunga y Guillermo Burdisso. El defensor arrastra un problema en el aductor, mientras que el volante tiene un fuerte traumatismo en la rodilla. Igualmente, las lesiones no son graves y ambos podrán jugar ante el Tomba.
Los que seguro se quedarán afuera del partido, aunque más no sea del banco de relevos, son el Martín Astudillo y Leandro Gurrieri, quienes sufrieron sendas distensiones. Como contrapartida, el que está en condiciones de reaparecer y seguramente estará en el banco es Andrés Franzoia, quien ya se recuperó del esguince de tobillo que lo tuvo un mes afuera de las canchas.
Con este panorama, la única duda del conductor centralista es la citada: si vuelve Zelaya y en reemplazo de quién. Si Cuffaro se guía por lo visto ante Atlético, el pibe Adrián De León tiene grandes chances de seguir entre los once; pero Castillejos le ha respondido a lo largo del certamen y no sería descabellado que el DT lo mantuviera.
De todas maneras, no habrá que aguardar demasiado para saber qué piensa el técnico, ya que este miércoles por la mañana volverán a entrenar en Arroyo Seco, donde a la noche concentrarán para partir el jueves a Mendoza en dos vuelos chárter.
Este martes, el plantel auriazul practicó en el Country de Arroyo Seco. Los futbolistas se dividieron en grupos por puestos para realizar trabajos tácticos: los arqueros trabajaron con el Rifle Castellano, los defensores bajo la supervisión de José Chamot y los atacantes junto al Polillita Da Silva, todos bajo la atenta mirada de Cuffaro.
Dos jugadores entrenaron en forma diferenciada: Mario Paglialunga y Guillermo Burdisso. El defensor arrastra un problema en el aductor, mientras que el volante tiene un fuerte traumatismo en la rodilla. Igualmente, las lesiones no son graves y ambos podrán jugar ante el Tomba.
Los que seguro se quedarán afuera del partido, aunque más no sea del banco de relevos, son el Martín Astudillo y Leandro Gurrieri, quienes sufrieron sendas distensiones. Como contrapartida, el que está en condiciones de reaparecer y seguramente estará en el banco es Andrés Franzoia, quien ya se recuperó del esguince de tobillo que lo tuvo un mes afuera de las canchas.
Con este panorama, la única duda del conductor centralista es la citada: si vuelve Zelaya y en reemplazo de quién. Si Cuffaro se guía por lo visto ante Atlético, el pibe Adrián De León tiene grandes chances de seguir entre los once; pero Castillejos le ha respondido a lo largo del certamen y no sería descabellado que el DT lo mantuviera.
De todas maneras, no habrá que aguardar demasiado para saber qué piensa el técnico, ya que este miércoles por la mañana volverán a entrenar en Arroyo Seco, donde a la noche concentrarán para partir el jueves a Mendoza en dos vuelos chárter.
