La presidenta Cristina Fernández de Kirchner repudió el atentado ocurrido esta mañana en Madrid, y lo atribuyó a quienes "muchas veces desde la irracionalidad pretenden imponer las ideas, cuando no se puede llegar con el voto, con la voluntad popular".
Cristina, en el discurso ofrecido en el Ayuntamiento de Madrid ante el Alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, y los 55 concejales madrileños, señaló que "los hombres y mujeres debemos condenar actitudes como esta que sacuden a una sociedad democrática y que solo tienen como sentido intentar quebrar la fortaleza de la ciudadanía".
"Permítanme, en primer lugar, solidarizarme con ustedes madrileños y con todo los españoles y repudiar como lo hacemos todos lo hombres y mujeres que me acompañan y como lo hacen todos los hombres de bien, por el episodio que ha tocado vivir en las primera horas de esta mañana a la ciudad de Madrid", dijo Cristina.
Y agregó que estos hechos "muestran una vez mas como se intenta muchas veces desde la irracionalidad imponer las ideas cuando no se puede llegar por el voto, por la expresión de la voluntad popular".
"Creo –dijo– que todos los hombres y mujeres, cualquiera sea el espacio en el cual militemos, debemos condenar actitudes como estas que sacuden a una sociedad democrática y que sólo tienen por sentido quebrar el espíritu y fortaleza, no ya de las instituciones sino de su ciudadanía. Vaya entonces mi solidaridad".
La presidenta habló tras recibir de manos del Alcalde Ruiz Gallardón, las llaves de oro de la ciudad de Madrid y en el momento de entrega de las llevas, el alcalde dijo: "Nunca necesitará (la llave) para encontrar abierta las puertas de nuestra ciudad, será siempre bienvenida".
A lo que Cristina respondió que "para mi los vínculos con España no solo obedecen a relaciones culturales e históricas, sino que tienen raíces en mi propia infancia", aludiendo a que "soy nieta de españoles".
Posteriormente agradeció al pueblo español por "como ha recibido España a miles de argentinos corridos por la dictadura en 1976, y luego por la desocupación que obligó a miles de argentinos a buscar en España lo que su país no podían tener: seguridad en cuanto a trabajo, en cuanto a la vida".
El encuentro con Ruiz Gallardón, referente progresista del opositor Partido Popular (PP) tuvo lugar en la Casa de la Villa, sede del Pleno Municipal del Ayuntamiento de Madrid, situado en el casco antiguo de la ciudad, junto a la Plaza Mayor. Tras el encuentro con el Alcalde de Madrid, la presidenta se dirigió a una reunión privada con los Reyes de España en el Palacio de la Zarzuela, donde compartirán un almuerzo.
Cristina, en el discurso ofrecido en el Ayuntamiento de Madrid ante el Alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, y los 55 concejales madrileños, señaló que "los hombres y mujeres debemos condenar actitudes como esta que sacuden a una sociedad democrática y que solo tienen como sentido intentar quebrar la fortaleza de la ciudadanía".
"Permítanme, en primer lugar, solidarizarme con ustedes madrileños y con todo los españoles y repudiar como lo hacemos todos lo hombres y mujeres que me acompañan y como lo hacen todos los hombres de bien, por el episodio que ha tocado vivir en las primera horas de esta mañana a la ciudad de Madrid", dijo Cristina.
Y agregó que estos hechos "muestran una vez mas como se intenta muchas veces desde la irracionalidad imponer las ideas cuando no se puede llegar por el voto, por la expresión de la voluntad popular".
"Creo –dijo– que todos los hombres y mujeres, cualquiera sea el espacio en el cual militemos, debemos condenar actitudes como estas que sacuden a una sociedad democrática y que sólo tienen por sentido quebrar el espíritu y fortaleza, no ya de las instituciones sino de su ciudadanía. Vaya entonces mi solidaridad".
La presidenta habló tras recibir de manos del Alcalde Ruiz Gallardón, las llaves de oro de la ciudad de Madrid y en el momento de entrega de las llevas, el alcalde dijo: "Nunca necesitará (la llave) para encontrar abierta las puertas de nuestra ciudad, será siempre bienvenida".
A lo que Cristina respondió que "para mi los vínculos con España no solo obedecen a relaciones culturales e históricas, sino que tienen raíces en mi propia infancia", aludiendo a que "soy nieta de españoles".
Posteriormente agradeció al pueblo español por "como ha recibido España a miles de argentinos corridos por la dictadura en 1976, y luego por la desocupación que obligó a miles de argentinos a buscar en España lo que su país no podían tener: seguridad en cuanto a trabajo, en cuanto a la vida".
El encuentro con Ruiz Gallardón, referente progresista del opositor Partido Popular (PP) tuvo lugar en la Casa de la Villa, sede del Pleno Municipal del Ayuntamiento de Madrid, situado en el casco antiguo de la ciudad, junto a la Plaza Mayor. Tras el encuentro con el Alcalde de Madrid, la presidenta se dirigió a una reunión privada con los Reyes de España en el Palacio de la Zarzuela, donde compartirán un almuerzo.


